Los informes más reservados sobre la salud del exmandatario en 2011 ya eran pesimistas. El ungido debía ser apoyado por Diosdado Cabello, según la esposa del creativo de la campaña.
Aquella noche del 8 de diciembre de 2012, el entonces presidente recién reelecto Hugo Chávez anunció en cadena nacional que su 'opinión firme, plena como la luna llena, irrevocable, absoluta, total', era que Nicolás Maduro fuese su sucesor. Lo que el público desconocía era que esa decisión no había sido tomada en ese momento sino que se meditó desde 2011, cuando ya se sabía la gravedad del cáncer que terminó con su vida. Así lo reveló, ante la justicia brasileña, la publicista Mónica Moura, una de las testigos claves del caso Lava Jato en Brasil.
Moura, quien aseguró haber recibido 11 millones de dólares en efectivo de Nicolás Maduro para la campaña presidencial de Chávez de 2012, relató que una de las preocupaciones de ese momento era la relación 'inestable y ambigua' de Maduro con Diosdado Cabello, para entonces presidente de la Asamblea Nacional y segundo vicepresidente del PSUV, por ello requería su apoyo 'integral'.
Estas revelaciones forman parte de los documentos oficiales del Supremo Tribunal Federal (STF) de Brasil, divulgados el jueves, en los que consta la delación de Moura, detenida en ese país bajo los cargos de lavado de dinero, corrupción y evasión de impuestos junto a su esposo, el también publicista brasileño, Joao Santana y considerado un 'genio del marketing político' en Latinoamérica.
TAMBIÉN PUEDES LEER: Ivanka Trump causa furor en Arabia Saudita
Los documentos publicados en cinco actas con más de 800 páginas y 20 anexos a los que El Pitazo tuvo acceso, fueron el resultado de casi ocho horas de grabación en 20 videos divulgados el viernes por el medio brasileño Folha.
Además de la negociación millonaria con Maduro, Moura revela los planes que se fraguaban en el seno del chavismo desde 2011, cuando ya se sabía en el círculo más cercano a Chávez la gravedad de su enfermedad, que le costó la vida meses después y que le impidió asumir el poder como presidente reelecto tras una campaña que costó 35 millones de dólares, aunque se sabía que podía quedar incapacitado o morir.
La declaración de Moura implica a varios líderes latinoamericanos y detalla campañas electorales pagadas a través de Odebrecht y en cuentas ocultas en Suiza a nombre de una empresa offshore registrada en Panamá como Shellbill. Entre los países implicados están Venezuela, Angola, Panamá, República Dominicana y Brasil.
LULA PIDIÓ EL FAVOR
La historia de Moura y Santana con Venezuela comienza en 2011 cuando el expresidente de Brasil, Luiz Inacio Lula Da Silva, invita a Santana a hacer la campaña electoral de Chávez para las presidenciales de 2012.
En las actas oficiales del STF de Brasil constan facturas, contratos y demás oficios probatorios. También explica los encuentros en Caracas con el presidente de Odebrecht en Venezuela, Euzenando Prazeres de Azevedo a quién, en febrero de 2017, el gobierno de Maduro ordenó aprehender.
Maximiliano Arbeláez, embajador de Venezuela en Brasil, en ese entonces, fue el principal intermediario. 'Él tiene excelente trato con dirigentes de grandes empresas brasileñas que tienen negocios en Venezuela como Andrade Gutiérrez y Odebrecht más allá de las relaciones cercanas con la cúpula del Petrobras, en Brasil', se lee en los documentos.
Arbeláez demostraba intimidad con la empresa Andrade Gutierrez, firma brasileña inscrita en el Registro Nacional de Contratistas de Venezuela, según el cual se ha encargado de la infraestructura de bases navales en el país, entre otras obras.
La compañía disponía de jets privados entre São Paulo y Caracas, para los viajes de Moura, Santana y otros involucrados. Además, corrió con los gastos de alojamientos en tres lujosos apartamentos en Caracas.
Maduro exigió que Moura recibiera casi todos los valores pagados por la campaña de reelección de Chávez, a través de pagos realizados por las empresas contratistas Odebrecht y Andrade Gutierrez. La parte de ese valor no contabilizado se pagó en especie, en Caracas directamente a la esposa de Santana. Maduro la recibía en su propio despacho de la Cancillería, le entregaba paquetes con dólares en efectivo y proporcionaba escoltas para darle seguridad en el recorrido hasta la sede de la productora donde funcionaba su equipo 'en una lujosa urbanización llamada Country Club'.
En la operación de corrupción de la campaña de Chávez, también figuró Franklin Martins, exministro de la Secretaría de Comunicación de Brasil, y su esposa Mónica Monteiro, quienes se encargaban de la parte de la campaña de Chávez en Internet, de acuerdo con los registros oficiales.
LA RELACIÓN DE MADURO Y DIOSDADO
De acuerdo con el relato de Moura, Maduro tenía una relación 'inestable y ambigua' con 'uno de los comandantes militares más importantes', Diosdado Cabello, en 2011. 'Y este es el punto clave de la cuestión. En la hipótesis que Chávez muera lo que parecía lo más probable serían convocadas nuevas elecciones y, para que Maduro fuera el candidato era fundamental contar con el apoyo integral de Cabello... Lo que no se sabía era cuál sería el costo político de la negociación interna', aseveró.
Como experta en marketing, tenía claro el panorama en Venezuela. 'Las elecciones (2012) mostraron un país dividido a la mitad y, si Chávez no hubiera hecho una buena campaña, incluso con el sacrificio físico que se impuso con un grave cáncer, podría haber perdido los comicios. El Gobierno tiene un serio déficit fiscal, con problemas de gestión en áreas importantes, con crisis de abastecimiento en dos sectores importantes (el eléctrico y el de alimentos)', reconoció, y agregó que en 2011 la población comenzaba a sentir los efectos de estos y otros problemas.
En un contexto de creciente inseguridad, violencia y narcotráfico, solamente un personaje con el gran carisma de Chávez, 'que realizó un gran trabajo político, social y simbólico', podría ganar unas elecciones en condiciones como las que enfrentó en el escenario más sombrío, aseveró.
La caída brusca en el precio del petróleo dejó al país en una gran vulnerabilidad interna y externa, explicó. 'Una de las grandes razones del éxito de Chávez fue su política de fuertes subsidios en programas sociales. Todos estos por los subsidios de petróleo y de los dividendos obtenidos en tiempos de bonanza', comentó.
El análisis que hizo contemplaba la imagen del gobierno de Chávez, tras la depreciación de petróleo, ante los países de Centroamérica y el Caribe que recibieron subsidios y regalos en materia energética.
'Esto debe ser considerado, con mucha cautela, por el cliente', dijo.
Estas revelaciones de corrupción, sobornos y lavado de dinero que implican al presidente Maduro y a Chávez, ocurren en un momento en el que Venezuela atraviesa la peor crisis política, económica y social en décadas. El panorama venezolano es de más un mes de protestas ininterrumpidas contra el Gobierno, más de 40 jóvenes asesinados en medio de una férrea represión por parte de los cuerpos de seguridad, que ha sumido al país en la primera rebelión popular venezolana del siglo XXI según la ONG de derechos humanos, Provea.
ESCENARIO EN 2011
'La situación en Venezuela ya era bastante caótica (en 2011)... todo el mundo apostaba a que Chávez no iba a conseguir reelegirse', relata Moura según el registro audiovisual. Describió el momento que vivía el país como de gran incertidumbre. 'Difícil de predecir su desenlace, ya que todo dependía del verdadero estado de salud del presidente Chávez', dijo.
Los informes más reservados del chavismo en 2011 eran bastante pesimistas, revelan las actas. 'En caso de ocurrir lo peor, podría haber un largo período de conmoción e inestabilidad. Razonando dentro de lo que parecía más predecible muerte o impedimento del Presidente en cuanto a la unidad del alto mando militar, en términos de sucesión, en cualquiera de las dos hipótesis, la tendencia más probable e `inquietante’ es que su sucesor fuera Nicolás Maduro', detalló.
Ahondó en el perfil de Maduro y cómo llegó a ser el elegido de Chávez. 'Es un líder de formación atípica y curiosa, fue conductor de autobús y Metro, y se convirtió en un importante líder sindical, de ahí su trayectoria política. Su estrella comenzó a brillar más fuerte cuando ganó la confianza del comandante, pasando a integrar su núcleo duro, en el cual mantuvo las relaciones más fuertes con Elías Jaua, Jesse Chacón y Jorge Rodríguez', dijo.
En el círculo íntimo de Chávez, en 2011, ya se sabía que Maduro afrontaría una campaña electoral mucho más difícil que la ya complicada que atravesó Chávez en 2012. 'Todo iba a depender del uso electoral que se hiciera de la conmoción causada por la posible muerte del gran líder', admitió.
Vía: Tal Cual