Miembros de la Secretaría Nacional de Discapacidad (Senadis) se trasladaron a la comunidad de Bajo Chiquito, Comarca Emberá Wounaan para ayudar a los migrantes que transitan por la zona.
Una migrante haitiana en estado de gravidez fue atendida por miembros de la organización Médicos sin Fronteras, quienes recomendaron su traslado hacia Metetí, para una evaluación urgente. Ella había llegado del cruce con la frontera colombiana.
De igual manera, se puso en conocimiento a las autoridades del Servicio Nacional de Frontera (Senafront), que en la montaña había otra dama de la misma nacionalidad, en las mismas condiciones, pero no había podido llegar todavía al poblado por lo que se coordinó su búsqueda.
Al momento de la llegada de los Delegados de Derechos Humanos de la Defensoría del Pueblo, a la comunidad de Bajo Chiquito, la semana pasada se contabilizó unas 497 personas migrantes, de estas 300 serían trasladadas a la Estación de Recepción de Lajas Blancas, a través de 19 piraguas.
De acuerdo a las autoridades los grupos más vulnerables (mujeres embarazadas, familias con niños y aquellos que presentaban una delicada condición de salud) iban a tener prioridad en este proceso de traslado.
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La Defensoría del Pueblo recomendó instalar más carpas para atender a las personas migrantes, quienes esperan turno bajo el sol para su traslado desde Bajo Chiquito a Lajas Blancas, presencia de las Unidades de Seguridad Fronteriza Humanitaria, así como insumos como alcohol y mascarillas para los migrantes.