En un taxi y con el cuerpo ensangrentado fue llevado un joven de 18 años hasta el Hospital San Miguel Arcángel, donde médicos confirmaron que ya no había nada que hacer. El muchacho llegó con cuatro balazos encima y no logró sobrevivir.
El violento episodio tuvo lugar en El Pantanal, un sector del corregimiento Don Bosco–La Providencia, en San Miguelito. Hasta ahora, nadie sabe exactamente qué pasó. Lo único claro es que el joven fue atacado a tiros y abandonado en un carro tipo taxi que lo dejó directamente en la sala de urgencias.
El reporte médico detalla que los impactos de bala lo alcanzaron en el tórax, los brazos y los muslos. Su estado era crítico y pese a los esfuerzos por estabilizarlo, murió poco después de ingresar al hospital.
La víctima tenía antecedentes con las autoridades por alteración a la convivencia pacífica, allanamiento de morada y un incidente previo donde ya había resultado herido en una riña. Esa información ya está siendo considerada por los investigadores para determinar si su pasado podría estar relacionado con su trágico final.
Pero el caso tomó un giro inesperado cuando, minutos después del ingreso del joven, una mujer de 23 años apareció en el mismo hospital con una herida de bala en el brazo. Aunque no se ha confirmado si fue parte del mismo tiroteo, la posibilidad está sobre la mesa y ya es parte del expediente.
Las autoridades se encuentran recabando información en la zona, pero como suele pasar en estos casos, pocos hablan. El Ministerio Público mantiene abierta la investigación para aclarar cómo ocurrieron los hechos y si hay más personas involucradas en esta escena que dejó una vida menos... y muchas preguntas más.


