La Fiscalía Adjunta de la Sección Primaria de Bocas del Toro encendió las alarmas tras recibir un reporte sobre supuestos cadáveres en estado de descomposición, ocultos en un bananal ubicado muy cerca del cementerio de San San.
La bomba estalló oficialmente el 29 de junio, cuando la fiscal Vielka Salinas solicitó formalmente el apoyo del Benemérito Cuerpo de Bomberos para activar un equipo de búsqueda que pudiera peinar la zona y determinar la veracidad del hallazgo.
Comunicado del Benemérito o de Bomberos de la República de Panamá.El misterio creció cuando comenzó a circular la nota firmada por la fiscal, y los propios bomberos salieron a confirmar su autenticidad en un comunicado emitido el jueves 3 de julio.
“Nuestra participación se limita a prestar colaboración operativa, apegados exclusivamente a lo que establece el documento oficial. El desarrollo de la investigación corresponde al Ministerio Público”, señalaron los bomberos.
Esto quiere decir que los camisas rojas sí están trabajando en el área, pero toda la información y los resultados dependerán del Ministerio Público, que aún no ha revelado si se han encontrado restos humanos.
La comunidad en San San está tensa y expectante, y en redes ya ruedan teorías que van desde tumbas clandestinas hasta víctimas de ajustes de cuentas. Lo cierto es que el terreno donde se busca está pegado a un cementerio, lo que ha hecho que muchos hablen de un “bananal maldito”.



