Desde la ciudad en la que creció como político y en donde conoció a su esposa Michelle, Chicago, el saliente presidente Barack Obama da su último discurso como líder de Estados Unidos, a 10 días de que el magnate Donald Trump asuma como mandatario luego de ganar las elecciones de noviembre pasado.
Mis queridos estadunidenses, Michelle y yo estamos muy conmovidos de los buenos deseos que nos han enviado, pero hoy es mi turno de decir gracias. Si nos hemos visto frente a frente, o no en realidad, le deseo lo mejor a la sociedad estadunidense', inició Obama su discurso.
El mandatario siguió entre aplausos, halagos y gritos 'las conversaciones que he tenido con ustedes me motivan y me hacen un mejor presidente y un mejor hombre, vine por primera vez a Chicago cuando tenía 20 años, y empecé a trabajar en grupos religiosos en las calles en donde vi por primera vez la esperanza y la cara de la clase trabajadora'.
El saliente presidente aseguró que el cambio realmente ocurre cuando la gente se involucra y demanda a los políticos, 'después de ocho años lo sigo creyendo'. Obama añadió que ese es el corazón estadunidense, 'la convicción de que somos creativos y siempre buscamos la felicidad'.
Entre abucheos que Obama después detuvo, dijo que se comprometió con Trump a hacer una transición tranquila tal como la hizo George W. Bush con él.
'La democracia realmente funciona si los políticos toman en cuenta al pueblo, en eso me quiero enfocar esta noche, en el estado de nuestra democracia', dijo el mandatario.