Seamos líderes que inspiramos, acompañamos y somos ejemplos a seguir. Que nuestra manera de liderar hable por nosotros.
Cuando un líder se enfoca únicamente en su cargo formal y ejerce el poder sin el apoyo de su equipo, el estilo de liderazgo se debilita. Esto ocurre porque se aferran tanto al poder que les confiere la posición y lideran desde la jerarquía siempre pensando que ellos son los que mandan e imponen su voluntad disfrazando la autoridad.
Que equivocado están aquellos que piensan que por tener un cargo que le da poder los convierte en líder. Las personas no se sienten valoradas, se sienten simplemente dirigidas por personas que infunden el miedo y amenazan constantemente para que las personas cumplan.
Cuando se asume el rol de liderazgo se accede a distintas formas de poder que pueden hacer la diferencia en la manera de liderar en influir en los demás. El cargo otorga poder legítimo, de recompensa, coercitivo, referente, experto, de información y de conexión. Cada tipo de poder representa una forma distinta de guiar, motivar o transformar.
Los depósitos externos en Panamá representan 37.9% del total de los recursos captados por el Centro Bancario Internacional. Richard BonillaEl poder legítimo otorga autoridad formal, el de recompensa logra resultados inmediatos sin generar un verdadero compromiso, y el poder coercitivo, que es basado en el temor, puede silenciar, pero no inspirar.
A quienes eligen equivocadamente liderar desde la imposición, le invitamos a mirar más allá del cargo porque el verdadero liderazgo que transforma no se construye con órdenes o imposiciones. Escuche bien, se construye con vínculos.
El poder experto permite guiar con solvencia, cuando se comparte el saber con humildad y se combina con el poder de información para fortalecer la confianza y una buena comunicación y con el poder de conexión cuando se abren puertas y se promueven oportunidades compartidas.
Y me atrevo a hacer esta reflexión, cuando aquellos que lideran un equipo, una organización o institución se instalan en la comodidad del cargo, sin escuchar, sin aprender, sin cuestionarse. Que pierden sensibilidad y se creen dueños del mundo.
Área bancaria. Elysée FernándezCuando se lidera orgulloso del poder que te da el cargo, es probable que puedas contagiarte del síndrome del sapo donde te conviertes en un líder Soberbio que no escucha porque todo lo sabe, Arrogante porque la opinión de los demás no es importante, Prepotente porque su mayor habilidad es imponer y Obstinado porque se aferra a sus decisiones.
Cuando hablamos del poder de referencia en un líder nos referimos a ese respeto, admiración y confianza que el líder se ha ganado de sus seguidores. El líder con sus cualidades y característica personales son considerados modelos a seguir y sus opiniones son valoradas. Son personas que gozan de credibilidad y los demás, creen y confían en él.
“La esencia del liderazgo radica en transformar la autoridad en acompañamiento, y el cargo en compromiso humano.” Sean presencia que inspira, no poder que intimida.


