Recuerdas cuando estabas pequeño y tus abuelos o los adultos te decían que no podías hacer algunas cosas los Viernes Santo porque habrían consecuencias, como quedar convertido en mono, pescado y hasta en una piedra.
Por ejemplo si se te subías a un árbol podías quedar convertido en mono, si ibas al río o a la playa quedabas convertido en pescado, si le pegaba a un árbol salía sangre o otros aprovechaban para darle una paliza y así diera frutos.
Otra de los cuentos que decían era que si estabas en la iglesia y mirabas para la parte de atrás podías quedar convertido en piedra.
También años atrás en algunos pueblos y entre adultos se comentaba que si tenías relaciones sexuales corrías el riego de quedarse pegado a su pareja durante el acto sexual, ya no hay quien lo crea, pero si se recomienda evitar tener sexo, ya que para muchos la Semana Santa es una fiesta que supone ayuno, incluso ayuno carnal.
También se creía que si te vestía de rojo en estas fechas corrías el riego de ser poseído por el diablo.
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VIERNES SANTO
El Viernes Santo el segundo día del llamado Triduo Pascual, un periodo durante el cual la liturgia católica conmemora la pasión, muerte y resurrección de Jesucristo, y con el paso de los años hay muchos lugares donde se han perdido la tradición y el respeto a la fecha más trascendental de las celebraciones de la Semana Santa.
Antes era un día más respetado por las personas y el silencio era más conmovedor, sobre todo a las 3:00 de la tarde, hora en la que se recuerda la muerte de Jesús en la cruz, para salvarnos del pecado y darnos la vida eterna.
En Viernes Santo no se celebra la eucaristía, en su lugar, se celebra por la tarde la Liturgia de la Pasión del Señor. A ser posible cerca de las tres de la tarde, hora de la muerte de Jesucristo, quien en ese entonces tenía 33 años.
Durante este día los fieles también se abstienen comer carne, en su lugar se preparan platos a base de pescados o mariscos.
Aunque aún hay manifestaciones de devoción popular con rezos del “vía crucis” en las iglesias y procesiones en recuerdo del drama vivido por Jesucristo en el Calvario, otras personas lo toman para descansar, recrearse, o para libar licor, a pesar de la ley seca.
Recuerde que el objetivo principal de la Semana Santa es la meditación para ser una mejor persona, por lo cual se exhorta a evitar lo juegos de azar o ingerir alcohol, es ideal evitarlo siempre, pero si no puede hacerlo por lo menos haga el esfuerzo durante estos días.
