Esto dice un estudio que cuando las parejas son tan abiertas a exponer cada una sus vivencias, que tapizan sus muros en redes sociales con miles de fotos en donde dicen que se aman. Ante este fenómeno, investigadores realizaron estudios especiales y como resultado dio que lo que demuestran es que son infelices.
Una realidad que contrasta, ya que las parejas se esmeran en aparentar que son realmente felices en su relación, matrimonio o noviazgo. Curiosamente cuando son novios y publican cada segundo lo que hacen como pareja, lo que viene es que cuando se llegue a una mayor formalidad, no duran las relaciones.
El trasfondo de este tipo de fotos melosas es llamar la atención y que en el “Qué dirán”, se diga que por lo menos está con alguien que le ama. Es como gritarle al mundo que es inmensamente feliz porque recibe un amor verdadero, cuando en realidad solo es el sentido que se le da a una imagen, contrastando con la realidad de las parejas.
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La ansiedad también aparece en las parejas, y están pendientes de los mensajes que reciben en sus publicaciones y se esmeran por subir más fotos para obtener muchos más likes, es como una aprobación que requieren para seguir como pareja.
Algunos críticos dicen que las parejas suben fotos como para reafirmar el sentido de pertenencia. En el momento que subes fotos con la pareja es como decir “Este es mío y nadie me lo quita”, “Él está ocupado”. “Me pertenece, es mío o mía”
Al final se reduce en esto: Al postear una foto es creer que eso es lo que son, cuando en realidad solo queremos que crean que eso es lo que somos. Siempre hay una realidad de cada foto amorosa, no todo es perfecto y casi siempre se hace para aparentar algo que no son.
Lo más saludable, dicen los expertos es que se cuide más la intimidad de la relación de pareja, que no se caiga en los excesos del ego y en las tendencias de redes sociales, que es mejor conectarse siempre con la realidad, o sea, con lo que realmente son.
