La fiscal de Anticorrupción Leyda Sáenz ha solicitado la imputación de cuatro personas por el desfalco millonario de la pasada administración de Pandeportes, por medio de partidas circuitales.
Entre esas cuatro personas se encuentra el exdirector de Pandeportes, Roberto “Bob” Arango.
Bob, una persona muy relacionada al deporte, en especial a la hípica y el béisbol, fue director de este instituto cuando llevaba el nombre de INDE. Era el gobierno de Mireya Moscoso, y Arango ocupó el puesto máximo del deporte panameño por poco menos de tres años.
Con el triunfo de Juan Carlos Varela en las elecciones del 2014, muchos apuntaban a Arango para el alto cargo, que había sido una papa caliente en la administración de Ricardo Martinelli. El paso de cinco directores en cinco años eran una fiel muestra de la improvisación que había en Pandeportes.
Arango fue designado en junio 2014 y lo ocupó sin sobresaltos hasta agosto 2017. Se informó que su salida era por razones de salud y meses después apareció como embajador de Panamá en Buenos Aires, Argentina.
El gerente de la delegación de #PanamáFutsalSub18, Gabriel Estrada obsequio de parte de FEPAFUT la camiseta de la selección nacional al embajador de Panamá en Argentina, Roberto Bob Arango. pic.twitter.com/J2GSZDr8SE
— FEPAFUT (@fepafut) October 3, 2018
Incluso le tocó recibir a la delegación panameña que asistió a los Juegos Olímpicos de la Juventud, solo días después de que el diario La Prensa reveló notas del “Secuestro Deportivo”.
Cuando se le preguntó al respecto, prefirió no dar ningún tipo de comentarios, lo que en su momento solo era una investigación periodística.
MILLONES PERDIDOS
Antes de que Arango llegara a Pandeportes, ya varios millones de dólares se habían perdido en obras inconclusas. Un par de exdirectores fueron investigados por el peculado en la construcción de las ciudades deportivas de Colón y Chiriquí.
Es decir, no había espacio para perder tiempo ni dinero en lo que a materia deportiva se refería.
Y uno de los detalles más relevantes de la investigación de La Prensa fue el aumento en aportes a las partidas circuitales de los diputados, muchos de ellos relacionados a federaciones deportivas.
De forma brusca, los subsidios en el deporte panameño aumentaron de $500 mil (2013) a $2.2 millones (2014) y luego a $14 millones (2015). Luego fueron $9.8 millones más hasta el año que Arango abandonó el cargo.
Con la excusa de “desarrollo deportivo” o “compra de implementos”, Pandeportes destinó muchísimo dinero y lo peor del caso es que nunca hubo la sustentación que validara el uso de cada centavo.
Este jueves 19, Arango fue el único de los cuatro indiciados que asistió al Sistema Penal Acusatorio (SPA), junto a su abogado.