El cuerpo de lanzadores volvió a ser la clave para que los Bravos de Atlanta volvieran a blanquear a los Marlins de Miami y así barrerlos en su Serie Divisional de la Liga Nacional.
Esta vez, la pizarra fue 7 carreras por 0. Cuarta blanqueada en cinco juegos en esta posteporada, y con esta impresionante actuación ahora están en la Serie de Campeonato de la Liga Nacional.
Atlanta, que no solo es picheo ya que fueron el segundo equipo que más carreras anotó en la temporada espera al ganador de la serie Dodger y Padres, para determinar cuál será la confrontación en la que se definirá al campeón de su liga. La última ocasión en que los Bravos llegaron a esta instancia fue en la temporada 2001.
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Kyle Wright lució intratable y se encargó de colgar seis ceros, trabajo en el que solo permitió tres imparables, con dos bases por bolas y siete ponches. Después siguieron tres relevos, que en tres tandas solo admitieron un hit para mantener el desfile de donas en la pizarra. Y mientras tanto, la ofensiva armó un rally de cuatro anotaciones en la tercera entrada, una más en la cuarta y otras dos en la quinta, para poner el choque totalmente fuera del alcance para los de Miami.
Travis d’Arnaud y Dansby Swanson terminaron la jornada con dos carreras producidas. Los primeros seis en el orden al bate fueron los encargados de anotar las siete carreras del equipo.
