“La educación es mucho más importante que el fútbol”. La frase no pertenece a ningún académico ni dirigente político. Esas palabras corresponden a quien fuera nada menos el capitán de la Selección de Panamá en su único Mundial de Fútbol disputado en la historia (Rusia 2018) y a uno de los mayores referentes del deporte en su país: Román Torres.
El futbolista de 35 años, creó en 2018 la llamada “Academia de Fútbol Román Torres”, donde recibe a niños y niñas de barrios populares, de muy bajos recursos económicos y en situación de riesgo social para ayudarlos a reconducir sus vidas a través del deporte.
Los 130 chicos de diferentes ciudades de Panamá no sólo reciben formación futbolística, sino también clases de inglés y enseñanzas escolares básicas como para poder encontrar oportunidades en la vida. “La idea de formar esta academia responde básicamente a lo que fue mi niñez”, aseguró Torres a FIFPRO en una entrevista.
“Yo nací en la ciudad de Panamá, en una zona llamada Barrio Lindo. Tenía una familia hermosa pero vivía dentro de un contexto de riesgo social. A lo largo de mi vida, he tenido muchos amigos que jugaban al fútbol muy bien, mejor que yo, y algunos terminaron muertos, otros en prisión y otros, metidos en pandillas o en la drogadicción. No tuvieron oportunidades ni alguien que los ayudara a salir de eso”.
En medio de la conversación, el ex capitán de la Roja no pudo dejar de recordar a Rafael, uno de sus mejores amigos de la escuela secundaria, que tuvo un camino desgraciado para su vida.
TAMBIÉN TE PODRÍA INTERESAR: La LPF multa con 8 mil dólares a Plaza y a Tauro; también habrá vetados y partidos sin público
“Rafael fue básicamente el responsable de que yo jugara al fútbol. Ambos estábamos en el equipo del colegio; un día, él empezó a entrenarse con la selección sub-17 y me ofreció que fuera con él a un entrenamiento. Fuimos pasando los cortes y finalmente quedamos. Con él compartimos la selección Sub-20 y la Sub-23 de Panamá. Sin embargo, él escogió otro camino y lo asesinaron a los 27 años. Yo nunca dejo de recordar su historia”.
La Academia de Fútbol Román Torres está basada en los pilares del concepto denominado por sus creadores como “BESIR” (Bendición, Educación, Sacrificio, Inteligencia y Respeto). “Mi próximo objetivo es poder crear un centro de alto rendimiento deportivo para estos chicos. El problema para ellos es que el barrio los absorbe mucho todavía. Ellos salen de la academia y en sus barrios ven tiroteos, asesinatos, los tientan con las drogas. Cuando se van de aquí, no sabemos si algunos chicos van a regresar o no. Con un centro de alto rendimiento los podríamos ayudar aún más a encaminar sus vidas”, concluyó.