Supuestamente, la presentadora de “Laura en América, Laura Bozzo decidió venir a Panamá después de que la Fiscalía General de la República de México (FGR) solicitó a la Interpol una ficha roja para buscarla en más de 190 países por el delito fiscal de haber vendido un inmueble embargado por el Servicio de Administración Tributaria (SAT).
Esta información es según dijo la vidente Deseret Tavares a Televisa.
La adivinadora tiró las cartas en la Tv y dijo que la peruana terminaba en Panamá.
“Ya salió, ya cambió de casa, pero esto es de país, muestra la corte y la justicia en contra de ella, le va a caer, van a ver más documentos que van a salir a la superficie. Si ella lega a regresar a México ahora que se va, está por irse o ya se fue dice que va a ir presa, mira la justicia le sale al revés. Dice que le van a encontrar más cosas para encerrarla. Ella movió el dinero fuera del país también, pero aquí sale que deja México y si vuelve va presa”, aseguró la mujer.
Tras eso y luego de mes y medio de que no se sabía nada de ella se conoció que la peruana rompió el silencio en Twitter.
“Siento no haber cumplido. Entendí que tenía tres años para hacerlo y si no me presenté es porque mis problemas de salud, avalados por médicos, era una sentencia de muerte anticipada. El SAT quiere que pague, ¿cómo hacerlo encerrada? Lo que se deba, se paga”, decía el mensaje que dejó de estar disponible.
“Los amo. Creí en gente a quien le di poder y me estafaron. Preferible creer en la gente del SAT que ellos, ladrones”, “Estafadores. Esos son los contadores. A mi me engañaron, son un asco”, “Puede ser que sea naca, pero ratera jamás” o “no se dejen engañar”, dicen algunos de otros sorpresivos mensajes.
El pasado 11 de agosto se le dictaminó prisión preventiva a Laura y eventualmente una orden de aprehensión. El inmueble embargado era garantía para pagar un adeudo al fisco por 13 millones 769 mil pesos (691 mil dólares). Esta falta tiene una pena de cárcel que va de tres hasta nueve años en México, reseña Univisión.
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