Un ambiente de total silencio marcó la presentación de Danny Ocean durante la ceremonia del Premio Nobel de la Paz 2025 en el Ayuntamiento de Oslo. El artista venezolano interpretó el Alma Llanera en una versión desacostumbradamente lenta y sobria, alejada del ritmo festivo que caracteriza a esta pieza emblemática de Venezuela.
La canción, compuesta en 1914 por Pedro Elías Gutiérrez con letra de Rafael Bolívar Coronado, suele escucharse en celebraciones, reuniones familiares y actos públicos. Sin embargo, en esta ocasión fue presentada únicamente con acompañamiento de piano y sin los elementos tradicionales del joropo, lo que produjo una reacción emocional inmediata entre los venezolanos presentes.
Durante la presentación, algunos asistentes bajaron la cabeza o se cubrieron el rostro mientras escuchaban los versos del tema. La interpretación se siguió en distintos países por parte de la diáspora venezolana, que supera los ocho millones de personas según estimaciones internacionales. Para muchos, la versión representó un recordatorio del vínculo cultural que mantienen fuera de su país.
Pasajes como “soy hermano de la espuma, de las garzas, de las rosas” adquirieron un peso particular al ser ejecutados con un tempo más pausado. La audiencia, incluida una delegación internacional y autoridades del comité Nobel, permaneció en silencio durante toda la pieza.
La presentación cerró con el verso “soy la espuma de los ríos y del viento soy cantor”, sin aplausos inmediatos. La pausa final completó un momento que se alejó de la celebración habitual del tema y que, en esta ceremonia, destacó por su tono reflexivo y contenido.


