Con la voz entre nostalgia y gratitud, Mónica Lee, una de las competidoras más queridas de Calle 7 Panamá, regresó al set que por años fue su campo de batalla... pero esta vez no para competir, sino para cerrar un capítulo.
Entre lágrimas, recuerdos y su icónico casco, Mónica Lee se despidió del set de Calle 7 Panamá. “Esto es cerrando ciclos ya”, confesó tras vaciar su locker 430. pic.twitter.com/ikheIqvih0
— Mi Diario Panamá (@MiDiarioPanama) May 10, 2025
En un emotivo recorrido que compartió con sus seguidores, Mónica mostró cómo vaciaba su locker, el número 430, repleto de recuerdos, zapatillas desgastadas, stickers de cascos, dibujos de fans, espinilleras, y hasta extensiones rosadas. “Saben que amo competir, pero ahora tengo otras prioridades”, confesó con serenidad, dejando claro que su regreso a la competencia ya no está en sus planes.
Durante su visita, se reencontró con compañeros como Alexis, Chaca, Gill, y hasta el “Sr. Villo”, el encargado de las estructuras del programa. “Me dio nostalgia pensar que hace seis meses estaba aquí dándolo todo cada día”, dijo Mónica, conmovida por los recuerdos que aún permanecen vivos en el set.
“Si yo me llevo esto, eso significa que ya no vuelvo… esto es cerrando ciclos ya”, expresó. Su casco original, con el que compitió por más de una década, será ahora parte de sus trofeos personales. Antes de irse, se dio el gusto de probarse el uniforme una vez más y hasta se lanzó al salto táctico, como un ritual de despedida que “movió muchos sentimientos”.
Mónica Lee fue figura estelar durante múltiples temporadas de esta competencia, ganándose el cariño del público por su fuerza, autenticidad y entrega total en cada prueba.
La salida de Mónica marca el fin de una era, pero también el inicio de nuevos caminos. “Me voy con el corazoncito lleno de amor de todas las personas que quiero que trabajan aquí. Hasta la próxima. Chao, los quiero”, cerró con una sonrisa que dejó claro que no fue una retirada amarga, sino una despedida en paz.