Doralis Mela lo volvió a hacer, pero esta vez no fue con un hit pegajoso ni con un movimiento de cadera… fue con el alma.
“Les vengo a contar un cuento. Anoche tocábamos en Colón y, para serles sincera, yo estaba triste. El baile estaba vacío. Fueron muy pocas personas y veníamos de una racha buena, pero no estaba viendo lo verdaderamente importante”, compartió la cantante en su Instagram.
Pero entonces apareció Agustín, un fan que viajó desde Belén de Donoso. “Horas en rancha. Horas de camino solo para llegar a verme. 😩❤️ Ahí entendí que yo estaba mirando la noche desde el ángulo equivocado”, confesó Doralis. Y es que lo que parecía un espacio apagado terminó iluminado por la energía de los pocos que fueron de corazón.
Doralis Mela junto a Agustín, el fan que recorrió horas solo para verla.“Porque sí, el baile estaba vacío… pero las pocas personas que fueron, fueron de corazón. Cantaron, aplaudieron, disfrutaron nuestra música y la de todos los colegas que estaban con nosotros en tarima. Le dieron vida a un espacio que, por números, parecía triste… pero por energía, tenía un brillo especial”, escribió, dejando claro que la calidad puede más que la cantidad.
Sus seguidores no tardaron en reaccionar:
“QUE BONITOOO❤️”,
“Mi Tepee, ¡ánimos! Por mucha cantidad llena de calidad”
“Te mereces todo lo lindoo, esos son los verdaderos fans”
“Sabias palabras Doralis… en los momentos buenos y en los malos hay que darles las gracias a Dios. Vendrán días buenos".
Doralis concluyó con una reflexión que nos llega al corazón: “A veces uno se obsesiona con la cantidad y se olvida de la calidad. Y anoche la calidad fue grande… Un baile vacío también puede llenarte el alma”.
Y la historia no pasó desapercibida para los colegas del medio. Diego de Obaldía, a través de sus redes, opinó sobre el tema y confesó que la historia de Doralis le hizo recordar una anécdota similar que él también vivió. Como él mismo lo dijo: “El show siempre debe continuar”.
Porque, al final, más allá de escenarios llenos o vacíos, la música y la pasión de quienes la viven de corazón no se detienen nunca.



