La filmografía de Guillermo del Toro es, simplemente, espectacular.
Desde su debut independiente con Cronos, donde se nota cada gota de esfuerzo, pasando por la crudeza del crecimiento en El Espinazo del Diablo, el oscuro cuento de hadas de El Laberinto del Fauno, hasta batallas épicas entre monstruos y robots o romances sinceros con criaturas acuáticas, el director siempre ha mantenido una constante: la exploración de la belleza dentro de lo aparentemente monstruoso.

Esa misma idea es el corazón de su nueva adaptación del clásico de Mary Shelley: Frankenstein. Una película cuyo discurso promocional repite que del Toro llevaba toda su vida esperando hacerla… y se nota. Desde el primer cuadro hasta el último, la pasión está en cada decisión visual, narrativa y emocional.

Uno de sus mayores logros es cómo utiliza su extensa duración a favor de la historia, permitiendo que cada tema respire. La película se divide en tres partes: un prólogo, la perspectiva de Víctor Frankenstein y la de su creación. Las tres exploran, desde distintos ángulos, la compleja relación entre padres e hijos.
Víctor es un científico brillante, obsesionado con superar profesionalmente a su padre, sin notar que está repitiendo exactamente los mismos errores emocionales. Esa ceguera deja un vacío imposible de llenar en La Criatura, quien, como cualquier hijo, solo buscaba amor y reconocimiento.

La Criatura, rechazada por su propio creador, emprende una búsqueda dolorosa pero humana: encontrar un lugar donde pertenecer. Lo encuentra en un hogar humilde, acompañado de un hombre ciego que no juzga su apariencia, sino su corazón y su potencial.
La palabra que mejor define esta película es “poética”.
Sus diálogos, incluso en los momentos más cotidianos, cargan sensibilidad; y sus imágenes —cuidadosamente encuadradas— transmiten una paz casi espiritual, especialmente cuando los personajes se enfrentan a la luz del sol como si fuera un abrazo silencioso.

Sí, su larga duración puede sentirse un poco pesada en ciertos momentos, y su estética gótica a veces pierde intensidad por lo impecable de la fotografía. Pero aun así, la combinación de todos sus elementos está ejecutada con tal precisión que Frankenstein se ubica entre las obras más destacadas de la filmografía de Guillermo del Toro.
Datos:
Elenco: Jacob Elordi; Mia Goth; Oscar Isaac; Christoph Waltz
Duración: 150 minutos
Director y Guionista: Guillermo del Toro


