La esperada secuela de 1996, “Happy Gilmore 2”, se convirtió en un fenómeno global tras su estreno en Netflix el pasado 25 de julio. Con 46.7 millones de vistas en sus primeros tres días, logró el mayor debut de una película de Adam Sandler en la plataforma y estableció el récord de mayor apertura en EE. UU. para una película de Netflix.
Este regreso del legendario golfista interpreta por Adam Sandler no decepcionó: encabezó la lista de las películas en inglés más vistas en el mundo y fue número uno en más de 47 países, incluyendo Panamá. Además, revitalizó el éxito del filme original, que ahora figura en el top 10 global con 11.4 millones de vistas.
La película dirigida por Kyle Newacheck y escrita por Adam Sandler y Tim Herlihy reúne a caras clásicas como Christopher McDonald, Julie Bowen y Ben Stiller, junto a nuevas estrellas: Bad Bunny, quien interpreta al caddie Oscar, Eminem, Travis Kelce, Post Malone, y otros cameos de lujo como jugadores de la PGA y figuras del entretenimiento.
La participación de Bad Bunny generó buena química con Sandler, quien compartió cómo se conocieron en un juego de Lakers, momento que dio origen a su personaje y destacó su humor sutil en pantalla. Travis Kelce protagoniza una escena surrealista cubierta de miel hasta que aparece un oso, lo que desató rumores entre fans. Algunos especulan que Taylor Swift podría ser quien viste el traje del oso, aunque Sandler lo negó oficialmente.
El filme sorprende por su mezcla de nostalgia noventera, referencias pop, y un emotivo homenaje a Carl Weathers (Chubbs), fallecido en 2024, que le da al relato una carga sentimental inesperada. Fue filmada en campos de golf reales y promocionada por Netflix con eventos en vivo e interacciones en redes sociales que amplificaron su impacto.
En resumen, “Happy Gilmore 2” no solo reafirma a Sandler como fenómeno del streaming, sino que impone su estilo irreverente con cameos memorables y un balance entre homenaje y frescura. La película ya está disponible para ver por completo en Netflix.
