El actor panameño Elmis Castillo rompió el silencio con un mensaje conmovedor y serio en sus redes sociales sobre la historia de su perrito Dante, a quien presentó hace pocas semanas como nuevo miembro de su familia.
Elmis explicó que Dante llegó a su hogar gracias a la empresa Dutch Spets, que además de usar su imagen en redes sociales para promocionar sus animales, le aseguró que el cachorro estaba sano. Sin embargo, a los pocos días todo cambió: el perro comenzó a decaer, a estar triste y luego apareció lo peor, sangre en las heces, vómito y diarrea.
Al llevarlo al veterinario, recibió un diagnóstico devastador: giardiasis (parásitos), otitis en los oídos y parvovirus, una enfermedad mortal en cachorros.
Promesas vacías y veterinario fantasma
Elmis relató que la empresa se llevó al perrito asegurando que cubrirían todos los gastos médicos. Él accedió, confiado en que recibiría atención. Pero nunca obtuvo pruebas: “No me mandaron fotos, facturas ni siquiera el nombre de la clínica. Solo supuestos escritos de un doctor que decían que el perro estaba grave”, explicó.
Al investigar más, descubrió que incluso le habían dado el nombre de un veterinario que supuestamente atendía a Dante. Pero al llamarlo, este médico le confirmó que nunca lo había tratado y que su nombre llevaba tiempo siendo usado en papeles falsos para exportación de animales. “Me estaban mintiendo en mi cara”, dijo indignado.
El actor señaló que llevaba días pidiendo evidencias, pruebas de vida, cualquier constancia, pero jamás se las dieron.
“Prefirieron dormirlo antes que atenderlo”
Tras días de silencio de la empresa, Elmis compartió lo que más temía: “Creo seriamente que Dante ya no está con nosotros. Prefirieron dormirlo antes que atenderlo, porque eso no es barato. Y somos nosotros, los humanos, los irresponsables de que un perrito tan bonito sufra de esa manera”.
Aseguró que lo más doloroso fue entender que Dante no era un caso aislado: “Esto pasa con muchos perritos. Estos criaderos se pintan como empresas serias, pero son granjas de animales hacinados, que falsifican vacunas para no gastar. Detrás de esos negocios hay una realidad que no estamos viendo”.
Elmis también contó que la persona de la empresa que lo atendía —con la que solo hablaba por teléfono— le dijo que era “una lástima” que algo así le hubiera pasado a alguien como él. “Sí, es una lástima, pero también es una bendición, porque yo no voy a dejar esto así. Lo voy a llevar hasta el final”, aseguró.
Finalmente, cerró con un mensaje contundente: “No estamos hablando de un suéter, de comida rápida o de una llanta. Estamos hablando de seres vivos. Dante llegó a mi vida con un motivo y ya dejó huellas en mí. Que descanse en paz mi perrito. Basta de maltrato animal en este país”.
Con esta denuncia, Elmis busca generar conciencia sobre el maltrato animal y las prácticas irresponsables de criaderos, además de exigir que las autoridades actúen frente a este tipo de situaciones.



