La cantante mexicana Paulina Rubio se encuentra en el centro de una nueva controversia, esta vez relacionada con su vida personal y familiar. Un tribunal de Miami ha emitido una orden que obliga a la artista a someterse a terapia familiar, luego de que fuera acusada de presunto maltrato físico hacia su hijo Nico, fruto de su relación con el empresario español Nicolás Vallejo-Nájera, conocido como Colate.
La audiencia urgente se llevó a cabo el pasado viernes, luego de que se conocieran detalles alarmantes sobre un incidente doméstico. Según la defensa de Colate, todo comenzó con una acalorada discusión entre Paulina y su hijo, la cual terminó cuando la cantante decidió retirarle el teléfono móvil como castigo. No obstante, los hechos habrían escalado rápidamente: Paulina presuntamente le habría propinado un manotazo a Nico.
Este relato fue respaldado por la cuidadora de la vivienda, Amber Glasper, quien al escuchar los gritos decidió llamar a la policía, lo que derivó en la intervención de las autoridades y en la apertura de un proceso legal. La cantante, que no se ha pronunciado públicamente sobre el caso, fue citada para comparecer y cumplir con las disposiciones judiciales que incluyen la terapia familiar.
Este episodio se suma a la ya extensa lista de conflictos legales y personales entre Paulina Rubio y Nicolás Vallejo-Nájera, quienes desde su separación han protagonizado sonados enfrentamientos por la custodia y el bienestar de su hijo.
Por ahora, la orden judicial busca asegurar el bienestar del menor y garantizar un ambiente seguro en el hogar, mientras se esclarecen los detalles del presunto maltrato.
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