Valeria del Carmen Murillo, la guapa joven que representa a Antón en el Señorita Panamá, sufre de epidermolisis bullosa simplex generalizada (EB), una enfermedad crónica que puede provocar cáncer, infecciones e insuficiencia orgánica.
Este año aparte de Valeria han elegido varias participantes con historias que contar.
“Es un honor para mi anunciar que soy candidata oficial para Señorita Panamá, convirtiéndome en la primera mujer con discapacidad (padecimiento de la piel crónico) en estar en las filas de este magnífico evento. Romper con todos los estereotipos es más que una misión para mí, es la oportunidad de reinventarme y mostrarle al mundo que la discapacidad no es sinónimo de limitación, con valentía, disciplina y mucho amor represento no solo al hermoso Valle de Antón; también con máximo orgullo llevaré la voz de los que no tienen voz y de unos de los sectores más vulnerables de nuestro amado Panamá, las personas con discapacidad que merecemos estar en todos los espacios sociales y tener equiparación de oportunidades. Espero que me acompañen en este nuevo camino de la mano de Dios. La meta: gritar ¡PANAMÁ ! Ante el mundo y el universo” escribió la también Licenciada en Periodismo sobre su designación.
La guapa joven reveló que la EB, por su complejidad, causa cierto grado de discapacidad física.
Valeria explicó que la padece desde su nacimiento y le causa ampollas y úlceras al roce.
La Eb le causa problemas motores del movimiento y siempre tendrá heridas. En Panamá no existe tratamiento para su patología y según el Senadis, su grado de discapacidad física está en un 66,1%, algo que podría aumentar con los años
Ella quiere erradicar eso de que la discapacidad es sinónimo de limitación, lástima o que hace a alguien menos bello.
De hecho asegura que son: “Personas con derechos, metas, con realidades diferentes, pero no por eso debemos ocultarnos”.
La exparticipante de Vive la Música piensa que es importante la inclusión de personas con discapacidad dentro de los certámenes de belleza.
Sobre los malos comentarios que dicen que su historia busca dar lastima y ganar el concurso, respondió:
“Todos tenemos historias dignas de ser contadas, la diferencia es que a mi no me da pena contarla y honro mi proceso. Es totalmente cierto historia no gana concurso, por eso este proceso del Señorita Panamá es de mucho trabajo y disciplina para lograr el objetivo personal que yo tengo. Siempre vivo de manera intensa y disfruto mucho de todo lo que hago”.
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