Mi Diario fue invitada por Sony Pictures a la premier de “Atrapado Robando”, la nueva película de uno de los directores más celebres del medio cinematográfico.

Darren Aronofsky es de esos directores que no te dejan indiferente: siempre logra incomodarte.
Lo hizo con su debut “Pi”, una rareza de ciencia ficción; con “Réquiem por un sueño”, un golpe brutal sobre la adicción; con “La Ballena”, un retrato íntimo de la depresión; y con “Cisne Negro”, donde Natalie Portman se pierde en la obsesión artística.
Por eso sorprende que ahora se atreva con un thriller de robos divertido, ambientado en 1998, con un adorable gato como pieza clave y lleno de referencias al béisbol.
Todo esto acompañado de un elenco estelar: Austin Butler (“Elvis”, “Duna: Parte 2″), Zoë Kravitz (Batman 2022), Bad Bunny, Vincent D’Onofrio (Daredevil 2015), entre otros.

La historia sigue a Hank, un exjugador de béisbol que mantiene una relación con una paramédica. Su vida se complica cuando su vecino punk le pide que cuide de su gato. Lo que parecía una tarea sencilla lo lanza a una aventura descontrolada por las calles de Nueva York a finales de los 90, donde cada esquina trae un nuevo desmadre.
Desde los primeros diez minutos, las imágenes que propone Aronofsky explotan de vida: escenarios vibrantes, llenos de detalles, con esa sensación de que todo puede pasar en cualquier momento. Y así ocurre: los giros inesperados mantienen al espectador al filo de la butaca de principio a fin. La fuerza de esos giros se multiplica porque rápidamente te encariñas con los personajes; cuando sufren, cada golpe se siente en el corazón.

Las escenas de acción son espectaculares, con persecuciones a pie y en auto, rodadas con un dinamismo que transmite pura adrenalina.
La influencia de “Después de hora” de Scorsese está por todos lados, al punto de sentirse como la versión de Aronofsky de ese clásico.
No es perfecta. Después del arranque, la película se toma un respiro y demora en enganchar. Pero una vez aparece el gánster interpretado por Bad Bunny, la historia pisa el acelerador y no vuelve a soltarlo.
Lo que hace grande a “Atrapado Robando” no es solo la acción ni el caos, sino su corazón.
La historia de un hombre que poco a poco se reconcilia con un pasado que evitó enfrentar durante años, aceptándolo con toda su crudeza. Una cinta emocionante, inesperada y con alma propia.



