Un hallazgo científico podría cambiar por completo la forma en que entendemos los tratamientos contra la obesidad. Investigadores del Instituto de Investigación Biomédica (IRB) de Barcelona, liderados por el doctor Antonio Zorzano y la doctora Manuela Sánchez-Feutrie, identificaron que la neuritina 1, una proteína hasta ahora vinculada al sistema nervioso, también se produce en el tejido adiposo marrón y actúa como un potente activador del gasto energético.
El estudio, publicado en la revista Nature Communications, demuestra en modelos animales que la neuritina 1 ayuda a prevenir la obesidad, la diabetes y la enfermedad del hígado graso al estimular la actividad mitocondrial y la expresión de genes termogénicos. Este tipo de grasa, conocida como “grasa marrón”, es clave para generar calor mediante un proceso de quema de energía llamado termogénesis.
A diferencia de fármacos como Ozempic o la Tirzepatida, que reducen el apetito, esta molécula actúa sin modificar la conducta alimentaria. “Es como una pastilla de ejercicio sin hacer ejercicio”, explicó Zorzano a ABC, quien también es catedrático de la Universidad de Barcelona e investigador del Ciberdem.
Los experimentos en ratones mostraron resultados prometedores: menor ganancia de peso, mayor sensibilidad a la insulina y reducción de la inflamación hepática, incluso en animales con dietas ricas en calorías. Este enfoque abre una nueva vía terapéutica para combatir la obesidad y las enfermedades metabólicas, una de las grandes epidemias del siglo XXI.
Los investigadores destacan que aún queda camino antes de trasladar este avance a ensayos clínicos en humanos, pero remarcan que se trata de un hallazgo con enorme potencial médico y social.



