El papa Francisco, a través de su portavoz Matteo Bruni, ha presentado disculpas a quienes se hayan sentido ofendidos por sus comentarios en una conversación a puerta cerrada con obispos de la Conferencia Episcopal Italiana.
Bruni asegura que Francisco “está al corriente de los recientes artículos sobre una conversación, a puerta cerrada, con los obispos de la Conferencia Episcopal Italiana”. Subraya que “como ha dicho en varias ocasiones ‘En la Iglesia hay sitio para todos, ¡para todos! Nadie es inútil, nadie es superfluo, hay sitio para todos. Tal como somos, todos’”.
La disculpa se emitió en respuesta a la polémica generada por la filtración de sus palabras, en las que Francisco señaló la necesidad de evitar que personas homosexuales sean ordenadas sacerdotes y mencionó un “ambiente de mariconería” en ciertos seminarios italianos.
