¿Sabías que Guadalupe, Lourdes, Fátima y otros nombres populares de vírgenes católicas en realidad se refieren a una sola persona? Todas son diferentes formas de llamar a María, la madre de Jesús.
Según la fe católica, María fue una joven judía de Nazaret que quedó embarazada sin relación con ningún hombre, por obra del Espíritu Santo. Las diferentes formas de nombrarla, llamadas advocaciones, surgen principalmente del lugar o la circunstancia donde se aparecía a la gente.
Our Lady of Guadalupe,intercede for your children always 🙏🏻 pic.twitter.com/qgvu8NdLwO
— Saint Adaugoijele ✝️ (@JustAdaugoijele) December 6, 2025
Estos nombres varían según regiones y culturas. Así, en España se le conoce como Nuestra Señora del Pilar, en México como Guadalupe, y en Portugal como Fátima. Cada título representa una historia, un milagro o una devoción local.
La devoción a María no es solo por las apariciones, sino porque se cree que ella es un canal directo hacia Jesús. Por ejemplo, en la boda de Caná, María pidió a Jesús que ayudara cuando se acabó el vino, y ese fue su primer milagro.
María Santísima, la Inmaculada Concepción y siempre Virgen.
— FE y más FE (@TarekSaidVzla) December 4, 2025
Señora y Madre nuestra, ruega por nosotros. pic.twitter.com/zk2nuemVXc
Aunque hay más de 1,000 títulos diferentes para María, todos ellos se refieren a la misma madre de Jesús, conocida por cuidar y proteger a la humanidad. Sin embargo, la Iglesia analiza con cuidado cada aparición antes de aprobar su culto oficialmente.
Recientemente, el Vaticano hizo aclaraciones para que María no sea vista como igual a Jesús. Un documento firmado por el Papa León llama a tener prudencia y recuerda que María intercede, pero no salva.
Así, las diferentes advocaciones reflejan la fe, la historia y la cultura de muchos pueblos, y mantienen viva la conexión especial que millones tienen con la madre de Jesús.




