Casi una semana después de devastar Bahamas, donde dejó al menos 43 muertos, Dorian tocó suelo canadiense, y aunque lo hizo debilitado, las autoridades advirtieron de su peligro por vientos violentos, lluvias torrenciales y olas de cerca de 20 metros.
Dorian entró en el continente cerca de Halifax degradado por el centro de huracanes canadiense a “ciclón postropical muy intenso” con vientos de hasta 140 km/h. Según las autoridades, 300.000 hogares no tenían electricidad en Nueva Escocia, así lo reseña Infobae.
"La seguridad de los canadienses es nuestra prioridad absoluta y estamos listos para ayudar a la Canadá atlántica ante esta tormenta", tuiteó el primer ministro canadiense, Justin Trudeau.
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Mientras Canadá enfrenta la tormenta, lo bahameños que lo perdieron todo tras el paso del devastador el huracán Dorian intentaban este sábado escapar de las islas más afectadas, donde la tormenta de máxima categoría dejó al menos 43 muertos, una cifra que las autoridades esperan aumente “significativamente”.
Esta temporada atlántica se prevén de 10 a 17 tormentas tropicales con nombre, es decir con vientos superiores a 39 millas por hora o más (63 km/h), y de ellas de cinco a nueve huracanes, con vientos de 74 millas por hora o más (120 km/h), según la Administración Nacional de Océanos y Atmósfera de Estados Unidos (NOAA).