La vida de Laura Pausini ha estado llena de emociones, pero pocas experiencias se comparan con la que vivió en el Vaticano. La reconocida cantante italiana, con más de tres décadas de carrera, se reunió por primera vez con el papa León XIV en un encuentro que describió como “surrealista y extraordinario”.
“Ha sido un momento y un encuentro que recordaré para siempre”, expresó emocionada la intérprete de Se fue, Víveme y Amores extraños, tras la audiencia privada con el Sumo Pontífice. Vestida completamente de negro, siguiendo el protocolo de etiqueta reservado para mujeres que no poseen el llamado “Privilegio de blanco”, Pausini deslumbró con elegancia y respeto.
Durante el encuentro, celebrado en una sala junto al Aula Pablo VI, la artista recibió el premio Icono Global de Billboard Italia, reconocimiento que celebra su talento y su compromiso por inspirar y unir generaciones alrededor del mundo. Aunque Laura ha recibido numerosos galardones en su carrera, este fue especialmente significativo por entregarse en presencia del Papa.
Como muestra de gratitud, la cantante tuvo un gesto inesperado: regaló a León XIV una canción inédita, Fratello sole Sorella luna, inspirada en el Cántico de las criaturas de san Francisco de Asís, quien será declarado patrón de Italia el próximo año.
“He querido regalarle algo personal, una canción a la que estoy muy unida desde que la cantaba en la iglesia cuando era niña”, explicó Pausini, visiblemente conmovida.
Acompañada por su equipo de Warner Bros, la artista selló con este encuentro un nuevo capítulo en su historia, reafirmando que, tras 30 años de carrera, sigue tocando corazones dentro y fuera del escenario.



