El presidente argentino, Javier Milei, calificó de “disparate propio de un socialista arrogante” la decisión del gobierno de Pedro Sánchez de retirar a su embajadora en Buenos Aires, María Jesús Alonso. Esto ocurrió tras el discurso de Milei en un mitin de Vox, donde tildó de “corrupta” a la esposa de Sánchez sin mencionarla explícitamente. Milei aseguró que mantendrá a su embajador en Madrid y recomendó a la esposa de Sánchez, Begoña Gómez, que busque un abogado.
Milei criticó duramente a Sánchez, sugiriendo que tiene un “complejo de inferioridad” y acusándolo de arrogancia por escalar un problema personal a un conflicto diplomático. El presidente argentino negó cualquier intención de interferir en la política española, defendiendo su viaje a España y su discurso en el mitin de Vox como una crítica al socialismo, y argumentó que la relación entre ambos países no se verá afectada por este conflicto, ya que es un vínculo histórico y cultural.
El ex presidente argentino, Alberto Fernández, reaccionó con incredulidad y recomendó un psicólogo tanto para Milei como para Sánchez. Milei, por su parte, rechazó cualquier disculpa y reiteró las acusaciones de corrupción contra la esposa de Sánchez, afirmando que el problema diplomático es responsabilidad del presidente español.
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