Un nuevo espacio cultural dedicado a Frida Kahlo ha abierto sus puertas en Coyoacán, el emblemático barrio donde nació y murió la artista mexicana más universal. Se trata del Museo Casa Kahlo, ubicado en la calle Aguayo 54, en la colonia del Carmen, una casona que invita a redescubrir a Frida desde una perspectiva más íntima y familiar.
A diferencia del Museo Frida Kahlo, conocido como la Casa Azul, que se centra en su vida artística y su relación con Diego Rivera, este nuevo recinto se adentra en los rincones personales de los Kahlo: sus olores, sus objetos cotidianos y sus raíces familiares. Tampoco debe confundirse con el Museo Casa Estudio Diego Rivera y Frida Kahlo, donde la artista vivió durante seis años y pintó obras emblemáticas como Lo que el agua me dio, El ojo avizor y El difunto Dimas.
Con su fachada roja y ambiente nostálgico, el nuevo museo propone un recorrido multisensorial que busca despertar la memoria emocional de los visitantes. “El museo tiene olor a azares, toronjas, café de olla con canela y piloncillo... y son estas cuestiones las que detonan la memoria. De alguna manera expanden la conciencia, pero al mismo tiempo es retroactivo, porque te permite incorporar en tu memoria lo que está sucediendo”, explicó Adán García Fajardo, director del recinto.
La propuesta del Museo Casa Kahlo no se limita a mostrar objetos o documentos inéditos, sino que invita a los visitantes a vivir la atmósfera de la familia Kahlo, evocando la vida cotidiana del hogar donde se forjó la sensibilidad artística de Frida. Cada habitación, aroma y textura contribuyen a construir un retrato sensorial y humano de la pintora que trasciende los mitos y las fotografías.
Este nuevo espacio promete convertirse en un punto de peregrinación para los amantes del arte y de Frida Kahlo, ofreciendo una mirada diferente, más cercana y emocional, de una figura que sigue inspirando al mundo con su autenticidad y fuerza creativa.



