El Vaticano ha revelado hoy la primera fotografía de lo que será la tumba del papa Francisco, ubicada en la Basílica de Santa María la Mayor, uno de los templos más emblemáticos de Roma y de profunda devoción para el pontífice argentino.
El sepulcro, de diseño sobrio y simbólico, estará situado a nivel del suelo y contará con una reproducción en relieve del característico crucifijo pectoral que ha acompañado al papa durante su pontificado. Esta pieza, que simboliza al Buen Pastor cargando sobre sus hombros a la oveja perdida, se ha convertido en un emblema del estilo pastoral y cercano de Francisco.
Según fuentes del Vaticano, la tumba podrá ser visitada por los fieles a partir del próximo domingo. La elección de Santa María la Mayor como lugar de descanso eterno no es casual: el papa Francisco ha mostrado siempre una especial devoción por la Virgen Salus Populi Romani, cuya imagen se encuentra en dicha basílica, y a la que acudía a rezar antes y después de cada viaje apostólico.
