Una noticia que sacude al mundo. Las autoridades de Irán ejecutaron la pena de amputación de manos a tres hombres condenados por robo, una medida extrema que, aunque contemplada en su código penal, pocas veces se lleva a cabo.
El anuncio fue confirmado este jueves por el poder judicial iraní a través de su sitio oficial Mizan Online, donde se informó que la sentencia se ejecutó en la provincia de Azerbaiyán Occidental, al noroeste del país.
Los tres hombres eran considerados ladrones profesionales y reincidentes, con múltiples denuncias en su contra por delitos cometidos en varias provincias iraníes. Las autoridades indicaron que la Corte Suprema de Irán ratificó la condena tras el rechazo de los acusados a devolver los bienes robados, en su mayoría joyas de oro.
El código penal iraní contempla la amputación como castigo en casos de robo agravado, especialmente cuando los delincuentes son reincidentes. Sin embargo, la aplicación de esta pena es esporádica y, cada vez que ocurre, genera un fuerte rechazo de la comunidad internacional.
Organizaciones defensoras de derechos humanos han condenado de manera reiterada este tipo de castigos, señalando que las amputaciones son prácticas inhumanas y contrarias a las convenciones internacionales de derechos humanos.
A pesar de las críticas, Irán defiende estas medidas como parte de su sistema judicial, argumentando que buscan disuadir a los delincuentes reincidentes y proteger los bienes de la población.
Este caso se suma a otros episodios que han generado tensiones entre Irán y las organizaciones internacionales, reavivando el debate sobre la vigencia de castigos corporales en pleno siglo XXI.



