Un hecho de violencia estremeció este miércoles a una comunidad del sur de Minneapolis, cuando un hombre armado irrumpió durante una misa en la Iglesia de la Anunciación, que también alberga una escuela católica, y abrió fuego contra los presentes.
De acuerdo con las autoridades, el ataque dejó al menos dos menores de edad fallecidos y otras 17 personas heridas. El sospechoso, cuya identidad no ha sido revelada, se quitó la vida tras la balacera.
“No existe una amenaza activa para la comunidad en este momento. El tirador ha sido contenido”, señaló la ciudad de Minneapolis a través de la red social X.
El alcalde Jacob Frey confirmó que las víctimas mortales son dos niños que asistían a la escuela primaria, donde apenas el lunes había iniciado el nuevo año escolar. El centro educativo atiende a estudiantes desde preescolar hasta octavo grado.
El gobernador de Minnesota, Tim Walz, manifestó su pesar por lo ocurrido: “Rezo por nuestros alumnos y maestros, cuya primera semana de clases se vio empañada por este horrible acto de violencia”, expresó en un mensaje publicado en X.
En el lugar se desplegó un fuerte operativo que incluyó a la Policía de Minneapolis, la Patrulla Estatal y agencias federales, mientras los padres de familia eran dirigidos a una zona de reunificación para reencontrarse con sus hijos.
Las investigaciones continúan para esclarecer las circunstancias del tiroteo y el posible trasfondo del ataque, que ya ha dejado marcada a una comunidad entera en los primeros días del nuevo ciclo escolar.



