Los vendedores informales que operan en los alrededores de la estación 5 de Mayo del Metro de Panamá están de acuerdo con desalojar la zona, pero piden a las autoridades ser reubicados en un lugar cercano donde puedan volver a trabajar de forma ordenada y segura.
Aunque el Metro había dado plazo hasta el 11 de agosto para abandonar el lugar, se ha extendido el tiempo para que los buhoneros desocupen el área hasta el 30 de agosto. Sin embargo, los vendedores denuncian que, hasta ahora, no han logrado entablar un diálogo formal ni con el Metro ni con la Alcaldía de Panamá para definir un plan de reubicación.
Los comerciantes solicitan a las autoridades una mejor comunicación y acuerdos claros que les permitan continuar sus actividades en sitios habilitados, evitando así perder su fuente de ingresos. Muchos de ellos han invertido en adecuar sus puestos, y temen quedarse sin alternativas para sostener a sus familias.
Este grupo de vendedores ha mostrado disposición para colaborar con las instituciones y mantenerse dentro de la ley, esperando que la solución sea justa para todas las partes y que se respete el esfuerzo de quienes dependen de esta labor diaria para vivir.



