La seguridad en La Chorrera se encuentra en una situación crítica. La continuidad de los centros de videovigilancia, que han sido una herramienta vital para la prevención y resolución de delitos en la región, pende de un hilo debido a la falta de pago a la empresa encargada de su operación y mantenimiento desde 2023.
Roxana Méndez, directora de la Autoridad Nacional de Descentralización, destacó durante un reciente recorrido en Panamá Oeste que las alcaldías deben decidir si continuarán con el servicio de videovigilancia, dado que la sostenibilidad financiera de estos centros no puede depender de los fondos de descentralización. Según Méndez, estos recursos están destinados principalmente a inversiones en obras y programas sociales, pero una vez culminadas estas obras, su mantenimiento debe ser asumido por las entidades que las solicitaron.
“Descentralización tiene lineamientos claros que priorizan las inversiones en obras o programas sociales. Sin embargo, la sostenibilidad de los proyectos, una vez concluidos, es responsabilidad de los que los solicitaron,” explicó Méndez, subrayando la importancia de que las alcaldías encuentren vías alternativas para mantener operativas estas cámaras de seguridad.
El alcalde de La Chorrera, Eloy Chong, reconoció la gravedad del problema y manifestó su intención de reunirse con el ministro de Seguridad, Frank Ábrego, para encontrar una solución conjunta que permita la continuidad de los centros de videovigilancia. Chong enfatizó que estos sistemas son cruciales para la seguridad del municipio, pero admitió que la falta de fondos ha impedido el pago a la empresa responsable de su operación desde el año pasado.
La posible interrupción de este servicio ha generado preocupación entre los residentes de La Chorrera, quienes dependen de estas cámaras para la vigilancia y prevención del delito en la zona. La comunidad espera que las autoridades locales y nacionales logren un acuerdo que garantice la sostenibilidad de estos centros de videovigilancia, evitando así un retroceso en la seguridad de la región.
Con las cámaras de seguridad al borde del colapso, la alcaldía enfrenta un desafío monumental para mantener operativa esta tecnología esencial. La posible alianza con el Ministerio de Seguridad podría ser la solución que permita mantener a La Chorrera bajo vigilancia, asegurando así la protección de sus ciudadanos.La continuidad de los centros de videovigilancia en La Chorrera, Panamá Oeste, está en riesgo debido a deudas pendientes. La alcaldía busca soluciones urgentes junto al Ministerio de Seguridad para mantener operativos estos sistemas esenciales para la seguridad ciudadana.