La bronca se armó en el Consejo Municipal de Arraiján, cuando la representante de Vista Alegre, Luz Denia Oliver, se enfrentó a la alcaldesa Stefany Peñalba por acusaciones que levantaron polvo.
Oliver, más clara que el agua, aclaró que lleva más de 40 años separada de su esposo y que él nunca ha trabajado ni en la junta comunal ni en el Municipio de Arraiján. ¿Por qué la mala fama? Peñalba insinuó que Luz estaba molesta porque botaron a su marido por “botella”.
El relajo empezó el jueves 18 de julio en la Alcaldía, con exfuncionarios gritando por la decisión de Peñalba de recortar personal. Luz exigió el nombre de su supuesto esposo y Peñalba no soltó prenda.
Entre tanto, los despedidos, de secretarias a jefes, juraron y perjuraron que no eran “botellas” y querían cobrar hasta la última quincena y sus beneficios. La alcaldesa, de su lado, llamó todo el lío un “show mediático”, aunque admitió que la cosa se le fue de las manos.
Pa’ completar el enredo, el Comité Ejecutivo del PRD respaldó a Luz Oliver contra los “abusos” de Peñalba.
Peñalba, por su parte, calificó la protesta de los exfuncionarios como un “show mediático”, aunque admitió que no esperaba que la situación en el Consejo Municipal se tornara tan desordenada como ocurrió.
Afirmó que cumplirá con los pagos pendientes y las deudas acumuladas de las administraciones pasadas, pero enfatizó que no pedirá disculpas a los exfuncionarios que demandaron una disculpa pública tras ser llamados “botellas”.
