Panamá enfrenta las secuelas de las lluvias: damnificados comienzan a regresar a casa
Las fuertes lluvias provocadas por el huracán Rafael y la tormenta tropical Sara han dejado un impacto devastador en Panamá desde inicios de noviembre, cobrando la vida de al menos once personas y dejando a cientos de familias damnificadas. Entre los estragos se cuentan inundaciones, deslizamientos de tierra, árboles caídos y ríos desbordados, afectando diversas regiones del país.
Cierre de albergues en Veraguas
En medio de los esfuerzos de recuperación, las autoridades informaron este martes 19 de noviembre que dos de los siete albergues habilitados en la provincia de Veraguas han sido cerrados: uno en Loma y otro en Morrillos. Las familias que se encontraban refugiadas allí han podido regresar a sus viviendas tras mejorar las condiciones en sus comunidades.
Sin embargo, cinco albergues siguen activos en zonas como El Espino, Zapotillo, Cerro Azul, El Macho y Las Palmas, donde las autoridades continúan brindando apoyo a los afectados.
Vía @tvnnoticias
— La Voz De Veraguas (@LaVozDeVeraguas) November 19, 2024
Ante mejoras del clima, cierran dos albergues en Veraguas, que eran utilizados para resguardar a las familias que fueron afectadas por inundaciones. pic.twitter.com/qcwQYvDAWN
Apoyo humanitario en marcha
El Ministerio de Desarrollo Social (Mides) sigue realizando evaluaciones, giras médicas y entregas de ayuda humanitaria para los damnificados. Debido a las dificultades de acceso en algunas áreas, ya se contempla una segunda ronda de entregas para garantizar que todas las familias reciban el apoyo necesario.
Las evaluaciones continuarán durante el martes para analizar el estado de las zonas afectadas y definir el cierre de los albergues restantes. Las autoridades han enfatizado que el retorno de las familias a sus hogares se hará de forma segura, priorizando su bienestar.
Resiliencia ante la adversidad
Aunque la situación climática ha mejorado, el impacto emocional y material sigue siendo profundo. Este proceso de recuperación demuestra la fortaleza y unión de las comunidades afectadas, mientras las autoridades trabajan para restablecer la normalidad.



