Luego de los enfrentamientos ocurrido la semana pasada en la comunidad de Barro Blanco entre originarios y unidades de la Policía Nacional, donde resultaron heridos de consideración, la Defensoría del Pueblo anunció la creación de una comisión especial, liderada por la dirección de Protección de Derechos Humanos junto a la regional de Chiriquí, para dar seguimiento y asistencia con las autoridades a las tres personas que resultaron heridas, así como a los niños, niñas y adolescentes que han quedado a la intemperie.
Tras una visita éste sábado a un centro médico los oficiales de derechos humanos de la Defensoría del Pueblo, de la regional verificó la condición de algunos heridos por lo que se le brindará el seguimiento para que reciban todas las atenciones.
Además, a partir de este lunes la Defensoría participará junto a Secretaría Nacional de Niñez, Adolescencia y Familia (Senniaf), de una inspección en el área para ver la situación de los NNA, que aparentemente están sin hogar.
Piden no llevar a los niños ni adolescentes a las protestas.La Defensoría del Pueblo abrió una investigación para determinar las posibles vulneraciones a los derechos humanos durante el desalojo en Barro Blanco, una vez concluida se rendirá un informe.
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Mientras que ese lunes 1 de noviembre también se reunió la Comisión de la Mujer de la Asamblea para abordar el tema de la agresión contra los niños y niñas que estaban en la protesta.
Walkiria Chandler, diputada suplente manifestó que es una reunión extraordinaria debido a los incidentes ocurrido el viernes 29 por su supuesto abuso policial en comunidades originarias en Barro Blanco y nos hemos reunido porque entre los más afectados están los niños, niñas y adolescentes. “No podemos tolerar esos abusos y condenamos el uso excesivo del aparato represor de la policía, sabemos que hay que proteger la propiedad privada, pero tampoco avasallando a otras personas”, dijo la diputada.
