Si Ricardo Martinelli hoy pusiera un pie en Estados Unidos, inmediatamente sería aprehendido. Eso se deduce del señalamiento que este miércoles 25 de enero hizo el secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, luego de la designación del exmandatario y aspirante a llegar nuevamente al Palacio de las Garzas, como una personas con participación en actos de corrupción significativa.
La categorización, que coincidió con la deportación a Panamá de los hijos expresidiarios de Martinelli, ha provocado una serie de reacciones en el país, en medio del proceso electoral que se está dando.
“Esto es delicado”, expuso el abogado Francisco Carreira al reconocer que la designación está hecha para causar daño, aun cuando no es un proceso legal. No obstante, recordó que desde que se destapó el caso de coimas de Odebrecht, el nombre del expresidente Martinelli comenzó a aparecer.
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En declaraciones al noticiero de Telemetro Reporta, el también aspirante a la Presidencia de República por la libre postulación expuso que sobre este caso la justicia de Panamá está en deuda, porque en otros países hace años que hay condenas. “En Panamá se quiere favorecer la impunidad”, lamentó.
El secretario de Estado de EE.UU., Antony Blinken hizo el señalamiento directo contra Ricardo Martinelli. Por su parte, Rodrigo Noriega, también abogado, expuso que el mensaje que envía Estados Unidos es contundente y lo consideró como el inicio de un proceso que podría derivar en acciones por parte de la Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC), lo que tendría un impacto en la parte económica del mayor empresario del país.
Para Noriega, la designación daña la reputación del país y conlleva a otros problemas. “Estamos a punto de hacer naufragar la nave panameña”, consideró en medio de las expectativas por la carrera que Martinelli mantiene para volver a la Presidencia.
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Hizo un llamado a la sociedad, empresarios y clase política, a la que fustigó por el daño que le hace al país con sus actuar, a dejar de ser meros espectadores. Sus declaraciones las ofreció en el noticiero de TVN.
En ese mismo canal, la exprocuradora y exdiputada Ana Matilde Gómez consideró que la justicia panameña está a prueba y “lo que no puede pasar aquí es que no pase nada”.
Los hermanos Ricardo y Luis Enrique Martinelli Linares llegaron la noche del miércoles al país tras cumplir sus condenas por blanqueo de dinero producto de coimas de Odebrecht. Acotó que el regreso de Martinelli a la Presidencia de la República, escogido por un grupo de panameños que no le importa con el país, sería una vergüenza pública. Y recordó que en los casos de corrupción que se investigan en el país no solo está la confesión de los hermanos Martinelli Linares hecha en Estados Unidos, sino el reconocimiento de culpa que hicieron investigados en los procesos, ya sea para colaborar con la justicia panameñas u obtener rebajas de pena.
“Si casi nos roba el país, ¿qué vamos a esperar, darle la llave para que se lleve la caja fuerte?”, se preguntó Gómez.
