Lo que por años fue una necesidad expresada por padres y maestros en Colón hoy comienza a materializarse. El programa Escuela Feliz de Cobre Panamá responde a esa petición de la comunidad, garantizando que más de 2,000 estudiantes de 24 escuelas en Donoso y Omar Torrijos Herrera reciban a diario un plato caliente y nutritivo.
El alcance de la iniciativa trasciende la nutrición. Con la entrega de mochilas, materiales educativos, equipos de refrigeración, tanques de agua y otros insumos, se ha fortalecido el proceso de enseñanza y se ha elevado el bienestar de las familias. La ansiedad del pasado ha dado paso a la tranquilidad: ahora los alumnos asisten a clases bien alimentados y con mayor entusiasmo para aprender.

Esta acción, que ha impactado a más de 3,600 alumnos entre Colón y Coclé con más de 100 mil libras de alimentos distribuidos, se ha convertido en un apoyo fundamental para escuelas como Coclé del Norte, Miguel de La Borda, Río Caimito, Guásimo, Nueva Esperanza, San Benito y Coclesito, entre otras.
El programa comprende que la formación integral requiere atender todas las facetas del estudiante. No se limita a satisfacer necesidades básicas, sino que busca enriquecer el aprendizaje y reducir la carga en los hogares. Cada material entregado elimina un obstáculo en el camino de cada estudiante.
“Cada estudiante beneficiado representa la semilla de un Colón con más oportunidades.

Escuela Feliz demuestra que la minería responsable genera frutos tangibles, una generación preparada para construir su propio futuro. Esa es la transformación palpable que hoy vibra en las aulas de Colón.” expresó Maru Gálvez, Gerente de Relaciones Públicas de Cobre Panamá.
Escuela Feliz de Cobre Panamá confirma que es posible transformar los recursos minerales en oportunidades de desarrollo sostenible. Las 24 escuelas actualmente beneficiadas señalan el rumbo para que las ganancias de la venta del concentrado de cobre continúen forjando un nuevo porvenir para Colón.


