Una escena desgarradora fue lo que hallaron las autoridades el pasado 15 de julio al allanar la Catolina Fundación, un supuesto refugio animal ubicado en Arraiján, donde más de 140 animales vivían en condiciones de hacinamiento, insalubridad y sin ningún tipo de control veterinario.
El operativo, liderado por la Fiscalía Superior de Ambiente, junto con la Policía Nacional, el Ministerio de Salud, Bienestar Animal de Arraiján y la organización MOCA Panamá, se realizó como parte de una investigación iniciada desde la semana anterior, tras múltiples denuncias y quejas de vecinos
Lo encontrado fue estremecedor: 123 gatos, 18 perros y 2 loros vivían hacinados, sin ventilación, en medio de suciedad y sin atención veterinaria. Un foco de enfermedades y sufrimiento, en un sitio que no tenía permisos ni condiciones mínimas para operar como refugio.
MOCA/ Parte de las condiciones que se encuentran los gatos actualmente.La fiscal superior Fátima Sánchez detalló que este tipo de condiciones pueden generar zoonosis, es decir, enfermedades que pasan de animales a humanos, o viceversa. Además, confirmó que el lugar será clausurado y no se permitirá más movimiento de animales dentro ni fuera.
La denuncia fue formalizada el 14 de julio por MOCA Panamá, aunque ya venía recolectando evidencia y quejas vecinales desde días antes. A raíz de esto, la custodia oficial de los animales quedó a cargo de MOCA, que ahora enfrenta un reto enorme.
Comida que les ofrecían a los animales.La representante de MOCA fue clara sobre la crítica situación sanitaria:
“Estamos frente a un caso muy difícil. Solo uno de los seis animales que se sacaron no tiene distemper, pero igual está en cuarentena. Los otros cinco con distemper fueron trasladados a una clínica desde el sábado. Hay muchos que, lamentablemente, tendrán que ser llevados a eutanasia”.
El llamado a la ciudadanía es urgente:
“Quedamos con la responsabilidad de todos estos animales, y necesitamos apoyo. Medicamentos, comida, limpieza, atención veterinaria… todo nos hace falta. Y también personas que quieran adoptar a los que están en condiciones”.
Eso sí, hay una condición clave para adoptar:
“Quien quiera recibir uno de estos perritos no debe tener otros perros, porque podrían estar en riesgo de contagio. Es por seguridad de todos”.
Los animales permanecen en cuarentena y están siendo evaluados. Mientras tanto, la Procuraduría General de la Nación reiteró que se aplicará todo el peso de la ley en este caso de delito contra animales domésticos, como lo establece el artículo 421 del Código Penal.



