Los constantes bloqueos en la vía Panamericana, provocados por la huelga magisterial, están dejando a los productores y comerciantes de Panamá Oeste contra las cuerdas. La llegada de productos agrícolas desde Chiriquí, una de las principales zonas productoras del país, se ha reducido drásticamente: ahora solo reciben mercancía dos veces por semana, cuando antes era casi a diario. Esto ha provocado que muchos alimentos lleguen en menor cantidad y hasta en mal estado, afectando tanto a vendedores como a consumidores.
“Siempre venían los lunes, martes... todos los días entraba mercancía. Ahora solo viene dos veces por semana, y ya no llega la cantidad que llegaba antes”, relató una vendedora afectada. Además, productos básicos como la cebolla, el apio, la lechuga y la papa han subido de precio, aunque algunos comerciantes aseguran que no han trasladado el aumento al cliente final, sacrificando así sus propias ganancias.
El impacto de estos cierres no solo se siente en los bolsillos de los productores y vendedores, sino también en la mesa de las familias panameñas. La escasez y el alza de precios afectan la dieta diaria, especialmente con productos como el ají y la cebolla, que forman parte esencial de la cocina local. La situación se agrava con más de un mes de protestas a nivel nacional, que han trastocado la cadena de suministro y dejado a pequeños comerciantes luchando por sobrevivir.



