En las próximas semanas, los consumidores de bebidas alcohólicas en Panamá experimentarán un aumento en los precios debido a la implementación de un nuevo impuesto selectivo sobre estos productos. Este ajuste es resultado de la reciente aprobación de la Ley 438, que ya está vigente y establece un programa de bonos permanentes para los jubilados, con el primer pago programado para abril de 2025.
Publio De Gracia, director de la Dirección General de Ingresos (DGI) del Ministerio de Economía y Finanzas (MEF), explicó que se han tomado todas las medidas necesarias para establecer la nueva tarifa de cobranza. “Aduanas tiene la nueva fórmula correspondiente para poder cobrar los impuestos determinados al valor del producto, y muchas empresas ya están actualizando la información,” indicó De Gracia.
La recepción de la Ley 438 ha sido variada. Aunque su objetivo es beneficiar a los jubilados con un bono anual de $140, que se traduce en un ingreso mensual adicional de $11.66, muchos consideran que este monto es insuficiente. Dividido diariamente, esto representa solo 0.38 centavos por día, lo cual ha sido ampliamente debatido en redes sociales.
Un internauta comentó: “Eso es sólo una solución populista... para siempre estar diciendo que por x partido se logró eso y por tal presidente, porque eso no alcanza para nada.”
Impacto en la Industria y el Comercio
El incremento en el impuesto selectivo ha generado críticas de la industria y los comerciantes. Mario Luis González, director ejecutivo de la Asociación de Dueños de Restaurantes, Bares y Discotecas de Panamá (Arbyd), expresó que “desde su óptica se ha castigado a un sector sin medir las consecuencias”. Según González, la medida fue tomada sin el debido consenso y su principal efecto será un aumento en los precios para los consumidores finales.
Además, los empresarios han advertido sobre un posible incremento en el contrabando de bebidas alcohólicas como resultado de los precios más altos.
Preocupaciones de los Consumidores
Los consumidores también han manifestado su preocupación. Un usuario en redes sociales señaló: “Puede que haya una abstención si los precios son muy altos, porque el costo de la vida está caro.” Otro añadió: “Lo que va a pasar es que ahora la gente tomará menos licor porque no le va a alcanzar para tanto y si la gente deja de beber, ¿qué va a pasar con esas pensiones si los jubilados pelearon por esa pensión y no hubiesen aceptado porque ellos también toman licor?”
Opiniones de los Jubilados
Por otro lado, Guillermo Cortés, dirigente del Movimiento Unidos por los Jubilados (Mundos), asegura que para aquellos que disfrutan del consumo de alcohol, un aumento de 0.5 centavos no disuadirá el consumo. “Si se les aumenta 0.5 centésimos, el consumo va a seguir igual, inclusive al alza,” afirmó Cortés.
El incremento del impuesto selectivo sobre las bebidas alcohólicas en Panamá, derivado de la Ley 438, tiene como objetivo financiar un bono para los jubilados, pero ha generado una serie de reacciones mixtas. Mientras las empresas ajustan sus precios y los consumidores se preparan para los cambios, la eficacia y el impacto de esta medida seguirán siendo objeto de debate en el país.