Veintiún jóvenes dieron este martes un paso firme hacia un mejor futuro al graduarse del Centro de Formación y Desarrollo de Adolescentes (CEFODEA), luego de culminar con éxito su proceso académico y vocacional.
Para muchos, no se trató solo de una graduación, sino de una segunda oportunidad para retomar el camino y construir un proyecto de vida con más opciones.
Formación para la vida
Los graduandos obtuvieron su título de premedia y, además, recibieron formación técnica en áreas como mecánica, informática, protocolo, chapistería y construcción.
El proceso se reforzó con talleres de habilidades blandas, aptitud laboral y desarrollo humano, diseñados para prepararlos no solo en lo académico, sino también para enfrentar el mundo laboral y social.
Reconocimiento al esfuerzo
Durante el acto de graduación de la promoción 2025 se reconoció el desempeño académico de los estudiantes más destacados.
El primer puesto de honor fue otorgado a Álvaro Abraham Rodríguez Velásquez; el segundo, a Alejandro Chanis González; y el tercero, a Xavier Alexander Rivas Cuesta, todos del taller de Informática.
Un centro que se transforma
La ministra de Desarrollo Social, Beatriz Carles, señaló que esta graduación refleja el trabajo realizado durante los últimos 17 meses para fortalecer y dignificar el CEFODEA como un espacio de oportunidades para jóvenes de San Miguelito y áreas cercanas.
“Hoy, gracias a la articulación entre el Gobierno, el sector privado y la comunidad, estamos reconstruyendo este centro, fortaleciendo sus talleres y potenciando su oferta académica”, expresó.
Ese esfuerzo permitió que el centro recibiera, por primera vez en más de 10 años, materiales e insumos para el taller de construcción y otros programas.
También se logró dotar nuevamente de acceso a Internet al taller de informática, un servicio con el que no contaban desde 2017, además del remozamiento de infraestructuras y la recuperación de áreas verdes.
Más cupos para 2026
Ubicado en el distrito de San Miguelito, el CEFODEA atiende a jóvenes que desertaron del sistema educativo regular o que buscan una formación vocacional rápida que les permita generar ingresos.
Durante 2025 el centro atendió a 44 estudiantes y para el próximo año se proyecta aumentar la matrícula a 100, con el objetivo de aprovechar su capacidad total de hasta 200 jóvenes.
