El escándalo no perdona ni en Semana Santa
La conocida influencer y figura polémica La Dikísima ha sido expuesta públicamente por la artista urbana Anyuri, mejor conocida como La Cuchita, quien la acusó a través de Instagram de deberle 400 dólares en mercancía.
La denuncia estalla en redes sociales
Anyuri compartió capturas y declaraciones señalando que La Dikísima no le ha pagado una mercancía entregada hace meses. Como era de esperarse, las reacciones no se hicieron esperar.
La Dikísima admite la deuda, pero se defiende
En un video que publicó después del Viernes Santo, La Dikísima confirmó que sí debe el dinero, pero explicó que ya había abonado 40 dólares y que tenía intenciones de pagarle poco a poco. Según ella, su situación económica cambió drásticamente tras salir “injustamente” de su trabajo.
“Yo no me dejé de comer, y también tenía que pagar otras cosas”, justificó.
“Yo sí respeto la cosa de Dios”
Uno de los puntos que más molestó a La Dikísima fue que Anyuri la expusiera en plena Semana Santa. Aseguró que por respeto a lo sagrado, prefirió no subir su respuesta inmediatamente.
“Ella no respeta, yo sí respeto la cosa de Dios”, dijo con firmeza.
¿Y las fotos con la mercancía?
Según La Dikísima, las imágenes en las que aparece con los productos no son prueba de uso personal, sino parte de los videos de promoción que grabó para ayudar a venderlos. Aseguró que parte de esa mercancía estaba en mal estado o anticuada.
“Nadie la quería porque estaban súpermente viejos como las sándalas”, soltó sin filtro.
Cierre con mensaje de fe y dignidad
Al final del video, dejó claro que no tiene malas intenciones y que está buscando la manera de generar ingresos para cumplir con su deuda. Defendió su nombre y su dignidad con una frase que encendió los comentarios:
“Yo sé lo que valgo como persona y yo voy pa’ lante.”
Reacciones divididas
En redes sociales, el público no ha dejado de opinar. Algunos apoyan a La Dikísima por hablar con transparencia, mientras otros respaldan a Anyuri por exigir lo suyo. Lo cierto es que este drama apenas comienza.



