Un operativo sorpresa ejecutado este domingo 10 de agosto por personal de la Lotería Nacional de Beneficencia (LNB) en el distrito de San Miguelito dejó al descubierto una red de venta ilegal de chances que pone en riesgo millones de dólares en pérdidas para el Estado panameño.
Durante las inspecciones realizadas en varios establecimientos comerciales del área, las autoridades encontraron evidencias contundentes que confirman la operación clandestina.
Entre los objetos decomisados destacan dispositivos para imprimir números, teléfonos celulares usados para la venta en línea y una cantidad considerable de dinero en efectivo, según detalló la Lotería Nacional.
Los operativos se focalizaron principalmente en locales ubicados en las zonas de Cerro Batea y Torrijos Carter, puntos identificados como focos de esta actividad ilegal.
Lo que llama la atención es que, además de la venta directa en estos comercios, se utiliza el sistema bancario panameño como medio para mover el dinero, con la aparente intención de evadir el pago de impuestos, una maniobra que profundiza el daño económico al Estado.
De acuerdo con datos oficiales, la comercialización ilegal de la lotería representa una pérdida aproximada de 200 millones de dólares anuales para Panamá.
Esta cifra refleja el gran impacto que tiene esta práctica en los ingresos del Estado y en la regulación del juego legal.
La Lotería Nacional de Beneficencia informó que la detección de esta red no se limita a un solo local, sino que varios puntos comerciales están involucrados en la venta de chances clandestinos, lo que pone en evidencia una red organizada que busca sacar provecho ilegalmente.
Las autoridades no se detendrán y continuarán con los operativos en distintos sectores, con el objetivo de frenar la proliferación de esta práctica que afecta la economía y la legalidad.
Además, se reforzarán los controles para evitar que estos actos ilegales sigan perjudicando al Estado y a los ciudadanos.
La recomendación para la población es evitar participar en estas ventas ilegales y denunciar cualquier actividad sospechosa relacionada con la lotería clandestina, para contribuir a la lucha contra este flagelo que, más allá de la pérdida económica, también implica un riesgo para la transparencia y seguridad en la gestión del juego de azar en Panamá.



