Algo extraño observaban los devotos en el santuario del Cristo Negro de Portobelo, pasada la festividad religiosa del 21 de octubre, se trataba de la nueva túnica con que los miembros del comité parroquial Jesús Nazareno, vistieron al milagroso santo de esta población histórica en la costa arriba de Colón.
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La novedad corrió como pólvora entre los portobeleños , quienes disgustados con el comité parroquial le exigían una explicación del por qué decidieron vestir con ese atuendo de “una tela rara y color rojo marrón”, que en nada se asemejaba al rojo vino de tela aterciopelada que acostumbra lucir el santo, para esta significativa fecha.
Los Portobeleños indignados, solicitaron al comité parroquial vestir con su atuendo original al “Naza”, o de lo contrario amenazaron en protestar con el cierre de la entrada de la iglesia de San Felipe, “No vamos a permitir que ustedes cambien la tradición como en la procesión, que quisieron obligar a los 100 hombres que cargan la imagen a vestir una túnica confeccionada por el comité de festejo”
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Pero, no solo los pueblerinos se asombraron, sino también devotos extranjeros que seguían llegando después del 21, para cumplir con su penitencia de visitar y encenderle una vela al Cristo Negro, una de estas quedó boquiabierta al punto de decir, “Me cambiaron al santo, que pasó aquí y por qué del irrespeto con ese color y tela del vestido nunca antes visto”.
Fueron muchas las reclamaciones que finalmente el padre Narciso Garay, pidió al comité parroquial acceder a la petición del pueblo y volver a colocarle su tradicional manto color rojo vino, lo que calmó los ánimos caldeados de los lugareños, informó el portobeleño, Camilo Santos.
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Es tradicional cambiar el Cristo Negro, un segundo vestido luego de la procesión para que amanezca en el altar con una nueva vestidura el día 22 de octubre, pero por primera vez se cambia en tres ocasiones. Se intentó conocer la versión del padre de la iglesia, pero fue infructuoso porque no respondió el celular o por mala señal no entró la llamada.
Nota: Migdalia Grinard
