"No hay mal que por bien no venga”, reza un refrán, y lo que le pasó a Narciso Bastidas González, un guna que en 1986 quedó envuelto en un caso de homicidio, quizás puede ser ese mal que le provino, pero ahora ama la antigua isla penal de Coiba, donde pasó buena parte de su reclusión.
Y este amor es una de las razones por la que empezó a escribir su memoria, que una parte se presentó el pasado miércoles bajo el título de “Baico”.
Dice que quiere contarle al mundo lo que vivió, aunque planea un segundo o hasta tercer libro. Tiene mucho que contar.
LA HISTORIA
En 1986, trabajando en un restaurante por vía Brasil ocurre ocurre un homicidio. Él no tenía nada que ver con el hecho, pero para los investigadores sí. Estuvo en el DENI (Departamento Nacional de Investigaciones) durante un mes y luego fue llevado a la cárcel Modelo, donde estuvo un año.
Estando allí, con la idea de escapar, hace una treta para que lo trasladaran a Coiba. Efectivamente se cumplió y lo que sigue es una historia de tristezas y aventuras que cuenta en este libro que fue editado por la Autoridad de Turismo de Panamá, como parte de la conmemoración de los 100 años de la creación de la Isla Penal de Coiba.
¿Que si logró fugarse? En el libro pueden enterarse de las veces que lo intentó.
¿POR QUÉ BAICO?
Bastidas, quien adquirió el apodo de “Mali Mali” (huesudo, en guna, por tirar machete), dice que es Coiba al revés, tal como lo conocían los presos.
El libro, además de autobiográfico también es ecologista. Mali aboga por la explotación sostenible de Coiba como sitio turístico y se muestra en contra de que se hagan más cambios para atraer el turismo.
Aunque actualmente labora como guardaparque de MiAmbiente por Arraiján, su amor a Coiba sigue.
La obra se puede adquirir en la librería El Hombre de la Mancha a partir del 3 de diciembre.
DATOS
Narciso es de Sasardi Muladub, comarca de Guna Yala.
Tiene 57 años de edad.
Fue detenido cuando tenía 23.
La condena fue de 17 años.
Cuando regresó a Panamá nadie le quería dar empleo cuando decía que venía de Coiba.
Fue en el Hospital San Miguel Arcángel donde por lo menos le dieron trabajo.
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