Puerto Armuelles, en la provincia de Chiriquí, se prepara para una transformación que promete devolverle el movimiento económico que tuvo décadas atrás. El presidente José Raúl Mulino realizó una inspección a los trabajos de la primera fase del nuevo puerto multimodal de Barú, obra que cuenta con una inversión de 21.3 millones de balboas y que contempla áreas para almacenamiento, transporte de carga y desarrollo industrial en un terreno de 35 hectáreas.
El proyecto, ejecutado por la Autoridad Marítima de Panamá (AMP), busca convertir la zona en un polo logístico con capacidad para atraer inversiones y generar empleo.
Mulino destacó que el puerto servirá para recibir barcos de carga grande, incluso buques tipo “panamax”, con un inicio enfocado en el movimiento de aceite de palma producido en la región, y que más adelante se extenderá a otras mercancías provenientes incluso de Costa Rica. “Este proyecto traerá progreso y empleo, como ocurrió en tiempos de la empresa bananera Chiriquí Land Company”, señaló el mandatario, acompañado por varios ministros y autoridades nacionales.
El nuevo puerto también se integrará al plan logístico regional, junto al ferrocarril Panamá–David–Frontera, considerado la obra insignia del actual gobierno, que permitirá la conexión directa con Centroamérica.
La AMP resaltó que la iniciativa no solo aportará al comercio y la exportación, sino que también será una oportunidad para que jóvenes y trabajadores de Barú se capaciten y participen en la operación del puerto.
El administrador de la AMP, Luis Roquebert, aseguró que este puerto se convertirá en una “nueva puerta de entrada a las oportunidades de Chiriquí”, al tiempo que recalcó que la juventud debe enfocarse en áreas como el turismo, la logística, el comercio internacional y el dominio del inglés para ser parte de esta transformación.

