La Universidad de Panamá enfrenta un recorte presupuestario que podría afectar la matrícula y la infraestructura de sus sedes regionales. El rector Eduardo Flores Castro solicitó ante la Comisión de Presupuesto de la Asamblea Nacional un presupuesto de 410 millones de balboas para el periodo fiscal 2025–2026, pero el Ministerio de Economía y Finanzas (MEF) recomendó asignar solo 317 millones, lo que pone en riesgo la operatividad de la universidad.
El asesor del MEF, Bernardo Bedoya, explicó que la reducción responde a la situación económica del país y que las instituciones deben priorizar sus recursos. Sin embargo, los diputados se mostraron en desacuerdo y buscarán que la universidad reciba un presupuesto mayor al sugerido por el MEF.
El rector Flores Castro alertó que, con una matrícula estimada en más de 90 mil estudiantes para 2025, la reducción podría impedir el ingreso de alrededor de 10 mil nuevos alumnos y afectar seriamente a las sedes regionales en Darién, Panamá Oeste, Aguadulce, Los Santos, Soná, San Miguelito y Bocas del Toro, que enfrentarán recortes superiores a 700 mil balboas cada una. Esta situación amenaza la descentralización de la educación superior en el país.
Flores valoró la disposición de la Comisión de Presupuesto y anunció que enviará un informe detallado sobre la distribución de los recursos que la universidad necesita para el próximo año fiscal.



