El Gobierno apuesta todo a integrar el Ministerio de Salud (Minsa) y la Caja de Seguro Social (CSS) para arreglar el despelote en la salud pública. En el programa Radar, el asesor Carlos Abadía y el experto Juan Antonio Casas lo pusieron en blanco y negro: no es fusión total, sino un “matrimonio con bienes separados” para unir fuerzas, cortar duplicados y atender a todos por igual.
Arranca en Herrera y Los Santos como piloto, enfocados en atención primaria, financiamiento, personal y gobernanza digital. Abadía lo pinta claro: “El gran ganador es la gente, sobre todo los asegurados en zonas sin CSS, como el interior”. Termina la discriminación: médicos atienden a todos, como ya pasa en David (Chiriquí). Avanzan en expediente electrónico único y telemedicina.
Casas alerta: Panamá gasta fuerte (6% del PIB, 21% del presupuesto público), pero falla en resultados. Mortalidad infantil triplica la de Chile y dobla la de Costa Rica; 40% del gasto sale del bolsillo de la gente. “Hay que unificar fondos en uno solo, como derechos humanos”, dice, recordando Costa Rica que eliminó el “asegurado/no asegurado” desde los 80.
No sobrecarga a la CSS ni al personal, prometen. El 30% de trabajadores pasa a “no asegurado” en su vida, peor con la pandemia. La prueba de fuego: reformar la ley de la CSS para fondo único. Ambos ven “planetas alineados” para que salga bien, aunque toma años. ¡Salud para todos, sin excusas!


