El ambiente político en Arraiján está que arde. El Movimiento Pro Revocatoria logró dar un paso clave en su objetivo de sacar del cargo a la alcaldesa Stefany Peñalba, luego de que la Dirección Nacional de Organización Electoral (DROE) desestimara un recurso legal interpuesto por el equipo de abogados de la jefa comunal.
La resolución, identificada con el número 001-225 DROE/A-RM de julio de 2025, fue confirmada en todas sus partes y representa un golpe directo a las aspiraciones de Peñalba, que buscaba frenar el proceso. Con esta decisión, el expediente regresa a la Dirección Regional para darle seguimiento al trámite de revocatoria, lo que mantiene viva la presión sobre la alcaldía de uno de los distritos más poblados del país.
Un revés inesperado
La noticia sorprendió porque la propia alcaldesa había declarado semanas atrás en entrevista con TVN Noticias que el recurso presentado por sus abogados “no prosperaría”. Segura de su posición, insistió en aquel momento que todo se trataba de una maniobra sin sustento.
“Este proceso no tiene fundamento sólido y estoy convencida de que no va a prosperar. El ciudadano quiere soluciones, orden y trabajo en equipo, sin mirar partidos. Este tipo de intimidación política con nosotros no funciona”, dijo Peñalba frente a las cámaras.
Hoy, la realidad es otra: el proceso no solo continúa, sino que se fortalece con el aval de la máxima instancia electoral en temas de organización.
El futuro político en juego
La decisión marca un nuevo capítulo en la batalla política que se libra en Arraiján. El distrito, que ha sido escenario de múltiples tensiones entre la ciudadanía y sus autoridades, ahora se encuentra en la mira nacional por el posible desenlace de este proceso de revocatoria.
El expediente devuelto a la Dirección Regional abre la puerta para que se continúe con la fase de trámites, lo que podría desembocar en un movimiento ciudadano de gran impacto. No se trata de un mero procedimiento: la confirmación de la resolución significa que los reclamos del movimiento cuentan con base para ser atendidos formalmente.
¿Qué viene ahora?
Aunque aún no hay una fecha concreta para el siguiente paso, lo cierto es que la presión política se intensifica. El Movimiento Pro Revocatoria celebra el fallo como un triunfo que legitima su causa, mientras que el equipo de Peñalba deberá replantear su estrategia legal y política para evitar que el proceso llegue a instancias que puedan comprometer su cargo.


